El Palquillo

Más de 50 grados bajo un paso: el cambio climático llega a las cofradías

Un costalero entrando en el paso de la Virgen del Carmen de Calatrava

Un costalero entrando en el paso de la Virgen del Carmen de Calatrava / PABLO LASTRUCCI

En torno a 50 grados, o incluso más, pueden registrarse bajo un paso en jornadas de calor extremo como las vividas el pasado fin de semana. Los médicos advierten de las graves consecuencias de exponer nuestro cuerpo a elevadas temperaturas durante un tiempo prolongado, con riesgo de padecer un golpe de calor.

Según diversos estudios e investigaciones, desarrolladas tanto por la Junta de Andalucía y como por el Gobierno de España, las temperaturas irán subiendo progresivamente varios grados en las próximas décadas, como así demuestran los datos recogidos el los últimos años. El cambio climático es una realidad, y las hermandades, con varios siglos a sus espaldas, no están al margen de esta situación, que pudiera cambiar el formato de sus procesiones en el tiempo estival.

Manuel Enrique Figueroa, catedrático de Universidad en el departamento de Biología Vegetal y Ecología, asegura que "debemos prepararnos para futuros escenarios climáticos del siglo XXI", más si cabe en una ciudad con veranos muy cálidos como Sevilla, donde el centro urbano carece de árboles y sombra. Le preguntamos sobre la repercusión directa de esta circunstancia en las hermandades y cofradías.

Un aguador sujeta una garrafa durante la procesión de la Virgen del Carmen Un aguador sujeta una garrafa durante la procesión de la Virgen del Carmen

Un aguador sujeta una garrafa durante la procesión de la Virgen del Carmen / PABLO LASTRUCCI

La celebración de actividades al aire libre, como las procesiones en los meses de verano, que cada vez es más largo e intenso, deberían seguir una serie de recomendaciones para evitar riesgos importantes, tanto para quienes integran sus cortejos como para las personas que asisten a presenciarlos. Es cierto que las cofradías se afanan por mantener hidratados a sus integrantes, incluso algunos capataces doblan sus relevos para hacer más llevadero el trabajo de sus costaleros, pero ¿es suficiente?

El catedrático es consciente del "inmovilismo" en este tipo de tradiciones, pero afirma que sacar un paso durante las horas centrales del día, "entre las 12:00 y las 16:00, de mayo a octubre, es un disparate". En ese caso, se podría "estudiar el horario y evaluar los recorridos", llevando las procesiones a la última hora de la tarde, "en horario vespertino", y "buscar calles más sombreadas".

Las procesiones del Corpus Christi, el Señor de la Sagrada Cena, la Hiniesta, las del Carmen o la salida de la Virgen del los Reyes, son algunas de las próximas en celebrarse. En el caso de la procesión del Corpus, pudiera ser una solución la instalación de "sombreado artificial", aunque en algunas zonas "no es viable" y en otras ya se instala habitualmente.

El paso de la Custodia bajo los toldos de la Plaza de San Francisco El paso de la Custodia bajo los toldos de la Plaza de San Francisco

El paso de la Custodia bajo los toldos de la Plaza de San Francisco / JOSÉ ÁNGEL GARCÍA

Figueroa insiste en otra recomendación de gran importancia y quizá algo ignorada por muchos ciudadanos, como el "uso de crema protectora para los rayos ultravioletas, sobre todo en la cara". Hay que tomárselo "muy en serio", pues "el cambio climático no es un tema baladí". Una correcta hidratación, bebiendo abundante agua, en todos los casos, es fundamental.

No debería tampoco descartarse, ante escenarios de alerta por temperaturas extremas, el hecho de "suspender o aplazar a otras fechas la celebración de una procesión". En días con 40 grados, al sol se pueden alcanzar los 45, y bajo un paso los más de 50. Según las estadísticas, el mes de julio es el más caluroso, llegándose a registrar el récord de 46,6 grados el 23 de julio de 1995.

Un termómetro al sol marca 41 grados en Sevilla en el mes de mayo Un termómetro al sol marca 41 grados en Sevilla en el mes de mayo

Un termómetro al sol marca 41 grados en Sevilla en el mes de mayo / José Angel García (Sevilla)

En cuanto a los costaleros, "la ventilación de los pasos podría bajar varios grados la temperatura". Esto se conseguiría con la "apertura de los faldones" o con la "sustitución de los actuales tejidos por otros más finos y transpirables". También es aconsejable "realizar un estudio de salud a quienes van a realizar esta actividad física". Del mismo modo, "aquellas personas propensas a sufrir en situaciones de calor extremo, deberían ser advertidas", como personas mayores o con alguna patología, y evaluar en ese caso si es recomendable su participación en la procesión.

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