Marian Aguilar, concejala de Igualdad del Ayuntamiento de Córdoba: “Los datos de violencia de género son inasumibles para una sociedad democrática”
25 N- Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer
Conjuntamente con la Delegación de Transformación Digital se están desarrollando diferentes talleres con el objetivo de reducir los efectos de la brecha digital que afecta a las mujeres

-¿Cuáles son los datos actuales de víctimas de violencia de género en la ciudad de Córdoba?
-Independientemente de la cuantificación numérica, porque van más allá de las estadísticas, lo que sí hay que decir es que son datos inasumibles por una sociedad democrática que no debiera de tener ninguna víctima de violencia de género. Las
cifras y las víctimas son más de las que debiéramos dentro de una sociedad que busca la justicia social. Se trata de datos alarmantes que ninguna sociedad debiera permitirse.
-Con qué presupuesto cuentan para dar respuesta a las necesidades de estas mujeres? ¿Es suficiente?
-Es un presupuesto ajustado a las competencias locales de las que disponemos. Es un presupuesto para trabajar en sensibilización, prevención y apoyo integral a las víctimas. El reto se hace muy grande. Nos acompañan datos alarmantes y el compromiso debe ser de las Administraciones pero no sólo de ellas, sino que debe ser un compromiso colectivo y aunar esfuerzos por parte de todos. La situación nos hace que tengamos que seguir avanzando en la inversión ante este reto que tenemos que enfrentarnos, ante esta situación que como sociedad vivimos y padecemos. Tenemos un reto social que es erradicar la violencia contra las mujeres.
-Las mujeres siguen denunciando poco. ¿Por qué cree que sigue ocurriendo eso?
-Debemos centrarnos en el perfil y en el estado anímico de la mujer que está siendo sometida a episodios de violencia de género. Son mujeres que no son conscientes de que son víctimas, se sienten culpables, se enfrentan a un estado anímico muy deteriorado, viven bajo amenazas y tienen miedo a cómo puede reaccionar su agresor; pero tienen que dar el paso. La Administración tiene los recursos y un itinerario para dar una respuesta integral a las víctimas. Por eso deben dar ese paso y ser conscientes de que así se les puede ayudar a salir de esa situación.
-En los últimos años se está poniendo el foco en el empoderamiento femenino como una manera de luchar contra la violencia. ¿Cree que este mensaje está calando en la sociedad?
-Las mujeres debemos tener confianza en nosotras mismas, y no sólo nosotras sino que toda la sociedad debe saber todo el aporte positivo que como mujeres hacemos al desarrollo de una sociedad. Parto de la base de que me gusta trabajar desde la igualdad. Todos somos iguales y no debe haber personas que sean más que otras; por lo tanto, considero que es mejor buscar el equilibrio entre las relaciones dando herramientas para evitar todas las relaciones tóxicas entre iguales y de que las mujeres creamos en nosotras mismas.
-La presencia femenina en el mundo laboral está alcanzando cuotas elevadas, aunque se siguen manteniendo las condiciones precarias que mantienen la brecha salarial. ¿Qué medidas han de tomarse para modificar esta situación?
-Principalmente medidas de conciliación familiar para seguir alcanzando esas cuotas de las mujeres en alta dirección y que ocupemos puestos destacables. Esa debería ser la clave.
-Otro de los temas pendientes está relacionado con la brecha digital. ¿Qué acciones está poniendo en marcha el Ayuntamiento en este sentido?
-Desde la Delegación de Igualdad y la de Transformación Digital se ha ido trabajando para buscar el equilibrio y romper la brecha digital. Se han puesto en marcha actividades y acciones que van encaminadas a romperla ofertando talleres de capacitación, de inicio en el uso digital y seguiremos trabajando en esta línea para combatir esta situación.

-En el ámbito digital asistimos a un aumento de la violencia hacia las mujeres. ¿Se está formando a los jóvenes sobre este tipo de situaciones?
-Las nuevas tecnologías y el uso de las redes sociales están siendo una nueva amenaza siendo utilizadas como una herramienta de violencia hacia la mujer. Los jóvenes son un núcleo de población que más consume tiempo en este tipo de comunicación y son datos alarmantes. Esto da lugar a situaciones preocupantes que estamos padeciendo como sociedad y nos hace poner el foco en el abordaje sobre este tipo de circunstancias, lo que plantea un nuevo reto que debemos afrontar.
-Las últimas investigaciones hablan de que el acceso a la pornografía se produce a edades más tempranas. ¿Cómo cree que hemos llegado a esta situación?
-Es una pregunta difícil de contestar, pero considero que ha tenido mucho que ver la facilidad que se tiene actualmente en el acceso a la pornografía. Cualquiera tiene un dispositivo, una ventana abierta a ese mundo de la pornografía. Como es una industria muy rentable, cada vez es más la oferta y con ella la demanda; por lo tanto, son cifras alarmantes a las que nos estamos enfrentando y por eso desde la Delegación de Igualdad, junto a los colectivos locales, estamos poniendo el énfasis en este asunto.
-Están nuestros jóvenes formados en violencia de género? ¿Cree que saben detectar si están inmersos en una relación violenta?
-Principalmente el problema es que los jóvenes no son conscientes de sus comportamientos que tienen muy normalizados, no teniendo identificados qué tipo de actuaciones son agresiones, episodios de violencia o actos que atenten contra el respeto a la persona. Por eso debemos trabajar en relaciones saludables bajo el prisma del respeto entre iguales y a la dignidad de las personas.
-¿Cuáles son las señales a las que debemos estar atentos para detectar si alguien de nuestro entorno puede estar sufriendo este tipo de relación?
-Cualquier comportamiento diferente nos debe hacer pensar en que una mujer puede estar siendo víctima o padeciendo episodios de violencia de género. Son mujeres en las que su estado anímico y psicológico va en deterioro y cualquier modificación de comportamiento en su forma de ser, en su cotidianeidad debe ser una de las pistas. Por otro lado, son mujeres que buscan un cierto aislamiento social, lo que también nos debería poner en alerta. Aunque las señales puedan ser muchas más, quisiera resaltar que cualquier cambio drástico en su forma de ser o en su forma de comportarse debe ponernos en situación de alarma.
También te puede interesar