Administrar vacunas de tipo ARNm contra el coronavirus en menores de 12 años es la mejor manera de garantizar la seguridad en estos grupos frente al contagio. Así lo confirma el Grupo Colaborativo Multidisciplinar para el Seguimiento Científico de la COVID-19, GCMSC, del Instituto de Salud Global de Barcelona, ISGlobal, y también el Colegio Oficial de Médicos de Barcelona, COMB.

En su último trabajo publicado, bajo el nombre "Riesgo de miocarditis y pericarditis en la infancia y adolescencia en el contexto de la vacunación de la COVID-19 con vacunas ARNm", los resultados coinciden en los beneficios de este tipo de tratamientos para evitar los síntomas más graves de la enfermedad.

Una vacuna "segura y recomendable" para los menores

En su estudio, el GCMSC ha asegurado que las vacunas ARNm contra el covid garantizan que esta vacunación sea "segura y recomendable". Los resultados se encuentran basados en la valoración de la baja incidencia de miocarditis o pericarditis relacionada con la vacunación en jóvenes menores de 12 años. La incidencia de miocarditis y/o pericarditis  se encuentra en 5 casos de cada millón de niños vacunados.

De igual modo, el grupo ha realizado una valoración de la disminución de la gravedad de la enfermedad cuando se produce la vacunación en este colectivo, a pesar de ser la dosis proporcionalmente inferior de la que se administra en adultos: tan solo una tercera parte de la general. Las vacunas, de manera efectiva, consiguen frenar el avance de la enfermedad en su forma más aguda así como sus síntomas más graves, como el síndrome inflamatorio multisistémico en niños. Este último también incluye problemas cardíacos, siendo una de las más frecuentes en jóvenes tras el contagio por COVID-19.

Así, el GCMSC, en colaboración con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, CDC americanos, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, AEMPS, y diversos grupos de profesionales han insistido en la importancia de la vacunación entre este colectivo de edad, uno de los que más incidencia acumulada tiene en la actualidad.

El pediatra Quique Bassat, del GCMSC e investigador del ISGlobal, impulsado por la Fundación la Caixa, ha explicado que "el balance riesgo/beneficio se decanta a favor del beneficio, tal como se ha demostrado en el grupo de adolescentes. De todos modos -ha añadido-, habrá que mantener una buena farmacovigilancia para este grupo de edad, y educar y concienciar a la sociedad civil para que sea capaz de identificar los síntomas asociados con la miocarditis y, si se dieran, pueda consultarlo rápidamente con médicos de familia y pediatras. El mensaje más relevante es que, en este grupo de edad, el riesgo de miocarditis post vacunal es mínimo, y en todo caso menor al asociado a la infección natural por SARS-CoV-2".