La crisis económica mundial hace peligrar los logros obtenidos en los últimos años en la lucha contra la expansión del sida y el tratamiento de las personas infectadas por el virus, alertó ayer el programa Onusida. Esta agencia de las Naciones Unidas señala que se espera un crecimiento de la mortalidad y la morbilidad, una dificultad de acceso a los tratamientos así como un mayor riesgo de contagio.

Estas son las conclusiones que se derivan de un estudio realizado por Onusida en 71 países donde residen 3,4 millones de personas sometidas a tratamiento antirretroviral, un tercio de los pacientes que lo necesitan.

Con respecto a la mortalidad y morbilidad, el informe indica que aumentarán debido a que "no se cumplirán los compromisos financieros de apoyo a la intensificación del acceso al tratamiento antirretroviral, lo que conlleva el riesgo de provocar muertes por enfermedades ligadas al VIH que se podrían haberse evitado".

También los programas de prevención parecen amenazados, dado que se espera que en 34 países donde reside el 75% de las personas con sida haya recortes a las ayudas destinadas a estos proyectos.

Aunque los logros en la lucha contra el sida han sido numerosos, en la actualidad en el mundo hay sólo cuatro millones de afectados en tratamiento de los 33 millones de personas que se estima que viven en el mundo con el VIH.