Sociedad

Ni despedidas de soltera ni bodas, la moda es celebrar el divorcio

Las fiestas de divorcio son muy parecidas a las despedidas de soltero/a.

Las fiestas de divorcio son muy parecidas a las despedidas de soltero/a.

En 2019, Catherine Navarro, de Nueva Jersey, se hizo viral y se convirtió en una inspiración para muchas personas del mundo. Después de 15 años intentando divorciarse de su marido lo consiguió, para celebrar este hecho montó una fiesta por todo lo alto a los pocos días de conseguir el divorcio. Esta fiesta se celebró como si fuese una puesta de largo o una despedida de soltera con tartas, champán, globos y música.

Desde hace un tiempo para acá es más frecuentes que se vayan celebrando fiestas cuando se produce un divorcio. Este tipo de fiesta es más común entre mujeres que hombres, y el sentido que le dan los que deciden hacerlo es que, en la mayoría de las ocasiones, se pone fin a una mala relación y puede ser una experiencia liberadora que sin duda debe celebrarse.

De hecho, la industria de los festejos ha acogido este nuevo tipo de celebraciones con los brazos abiertos. Normalmente la fiesta suele parecerse mucho a una despedida de soltera. A continuación unos cuantos consejos e ideas por si algún día (esperemos que no) tienes que celebrar una fiesta de despedida de casada.

  • Antes de organizar este evento, hay que asegurarse que no tendrá una carga contraproducente para la homenajeada en cuestión. La separación suele ser algo doloroso, es complicado desprenderse de las costumbres y hábitos de la otra persona. Para realizar esta celebración debemos saber que va a ser un momento agradable para la persona que se ha divorciado.
  • Lo ideal es que se celebre entre grupos íntimos, preferentemente de personas del mismo sexo, es decir, si es una mujer la que se ha divorciado, lo ideal es que acudan sus amigas. El vínculo entre el mismo sexo puede ofrecer el respaldo sentimental necesario.
  • Hay que tener en cuenta la intimidad de la reunión, elegir bien a los invitados ya que puede que algún momento la fiesta se transforme en una charla de auto-ayuda, experiencias personales e íntimas. También hay que tener en cuenta la selección de invitados, puede que alguno de los invitados tenga mala impresión de la situación y no este cómodo durante la fiesta, igual que puede ocurrir con la homenajeada.
  • Por último, debemos asegurarnos de que es lo que quiere hacer la persona divorciada, para así organizar una fiesta acorde a sus deseos. No debemos organizar algo que nos vaya a gustar a nosotros. De esta manera, la persona recién divorciada se sentirá agradecida y en un ámbito de amistad y diversión.

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