Sociedad

Descubiertos en Nueva Zelanda unos tiburones que brillan en la oscuridad

Descubiertos en Nueva zelanda unos tiburones que brillan en la oscuridad

Descubiertos en Nueva zelanda unos tiburones que brillan en la oscuridad

En Nueva Zelanda, se ha podido observar al tiburón carocho, que mide casi dos metros de largo y es el vertebrado luminoso más grande del mundo conocido hasta el momento. La investigación que se ha llevado a cabo ha confirmado que en las profundidades marinas esta especie es capaz de producir una luz visible a través de reacciones bioquímicas. 

Los ejemplares fueron capturadas en enero de 2020 por parte de miembros de una expedición del Instituto de Investigación del Agua y la Atmósfera del país neozelandés y se trabajó sobre una vasta área que se extiende a lo largo de más de mil kilómetros al este del estado oceánico, es decir, en pleno Pacífico. Cuando analizaron a los ejemplares, observaron que producen una luz entre azul y verdosa que brilla y oscurece lentamente. Sin embargo, no producen destellos.  

La clave se encuentra en la bioluminiscencia, una capacidad que tienen ciertos animales que tienen unos órganos, los fotóforos, que son los que producen la luz. Este proceso está controlado por el sistema nervioso. A pesar de ello, el tiburón controla la producción de luz a través de las hormonas, tras la investigación que se ha realizado por parte de los científicos. 

Clave para distintas actividades 

Estos tipos de tiburones utilizan la bioluminiscencia para cazar a sus presas, para cazar a sus presas, reproducirse u otras actividades. También, puede utilizar la producción de luz para camuflarse en ambientes con cierta luz natural para protegerse de los depredadores. La hormona que produce este proceso es la melatonina, la cual es la misma que induce al sueño a los seres humanos. Ésta es el desencadenante de la producción de luz. 

Se calcula que, aproximadamente, 57 de las 540 especies que se conocen de tiburones pueden producir este tipo de luz, la mayoría de ellas en el denominado "crepúsculo" del mar, a más de 200 metros de profundidad y donde apenas llegan los rayos del sol. Hay numerosos organismos luminosos en la zona en la que se ha trabajado por lo que se puede señalar que es muy importante esa producción de luz en las profundidades del mar y que puede tener un papel destacado en la estructura del ecosistema del planeta. 

Por todo ello, son fundamentales estas investigaciones que se desarrollan en numerosos puntos de la Tierra. El conocimiento sobre cómo son capaces estos tiburones de producir luz para poder vivir, podría ayudar a entender más a las especies que habitan las profundidades marinas y todo lo que les rodea, sobre todo, en el área donde se ha analizado este trabajo, en el océano Pacífico, de las llanuras abisales y la Fosa de las Marianas y de unos lugares donde todavía no se ha investigado lo suficiente.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios