El reglamento del Parlamento Europeo sobre la responsabilidad de las compañías aéreas en caso de accidente recoge como indemnización para los afectados o familiares de víctimas de un mínimo de 127.000 euros, contemplando también el adelanto, por parte de la aerolínea, de 20.300 euros en un plazo máximo de 15 días desde su identificación. Por su parte, afectados y familiares anunciaron hoy su intención de buscar asesoramiento legal para "organizarse y hacer algo", aunque no precisaron si sería una plataforma o asociación de víctimas.

La legislación comunitaria recoge que "no hay límite económico fijado para la responsabilidad en caso de lesiones o muerte del pasajero" y contempla que para los daños de hasta 100.000 'derechos especiales de giro' (dge, unidad en la que viene expresada la indemnización y equivale a 1,26 euros aproximadamente) la compañía no podrá impugnar las reclamaciones de indemnización. Por encima de dicha cantidad, la compañía aérea sólo puede impugnar una reclamación en caso de que pueda probar que no hubo de su parte negligencia ni falta de otro tipo. 

De este modo, y según los términos de la legislación, tanto los familiares de los fallecidos como los supervivientes del accidente podrían un 100.000 dge, unos 127.000 euros en concepto de indemnización. En el avión siniestrado viajaban 172 pasajeros, con lo que el desembolso total de la compañía podría ser, cómo mínimo de 50 millones de euros. En este sentido, fuentes del sector señalaron que las compañías aéreas suelen tener contratadas tres tipos de pólizas, una para cubrir los gastos materiales, una de responsabilidad civil para los daños personales y una tercera especial para la tripulación.

Spanair ya aseguró ayer que coordinaría el pago de las indemnizaciones a los afectados con las compañías aseguradoras con la que tiene contratada su póliza en el menor tiempo posible, ya que el contrato se encuentra "reasegurado" en el mercado, lo que significa que se encuentra en manos de varias compañías. Sin embargo las mismas fuentes del sector explicaron que es difícil determinar el plazo para el cobro, tanto de las indemnizaciones personales como materiales, ya que depende de cuándo se determinen las causas del accidente. Aún así, la ley señala que deberán recibir en un plazo mínimo de 15 días, desde el reconocimiento del cadáver, 20.300 euros, un anticipo para "cubrir sus necesidades inmediatas".

Mientras, los familiares se reunían hoy con la vicepresidenta del Gobierno María Teresa Fernández de la Vega, que se negó a hacer ningún tipo de declaraciones sobre este encuentro por "respeto a las víctimas". Los que sí hablaron fueron algunos afectados por el siniestro. Uno de ellos, Javier Núñez, que perdió a dos hijos, su nuera y un nieto en el accidente, se mostró molesto por la visita de De la Vega, que les preguntó si se encontraban a gusto: "¿Cómo va a estar a gusto una persona que tiene una herida que no se le va a curar en la vida?", señaló. "Nos están engañando a todos, lo que están diciendo ahí (en referencia a la reunión con la vicepresidenta) es mentira, no quiero políticos a mi lado, quiero soluciones", denunció.

Buscan asesoramiento legal

Otros familiares aseguraron además que están buscando asesoramiento legal a través de un abogado "para organizarse y hacer algo", aunque no detallaron si la iniciativa podría ser una asociación de afectados. Así lo explicó Salvador, que perdió a su sobrino en el accidente, y que señaló que buscarían a un letrado que les aconseje qué hacer y que pasos deberán seguir. Salvador, al contrario que Núñez, agradeció de parte de los familiares la visita de De la Vega "se ha portado muy bien", dijo.

Es siguiente paso para ellos es la reunión con la compañía, de la que, aseguran, no sabían nada desde el día de suceso. Hoy, la aerolínea española, a través del director de Recursos Humanos, Héctor Sandoval, envió un mensaje a los afectados y a las familias para ofrecer "su apoyo incondicional". Sandoval reiteró que "la prioridad" de su empresa es la asistencia a las familias y superviviente y que por ello cubrirá "cualquier necesidad" que puedan requerir. En este sentido apuntó que Spanair colabora con el Ministerio del Interior en la creación de un dispositivo para estar en contacto "todos los días" con los allegados de las víctimas para ayudar en "temas de compensación e indemnización económica".

Sin embargo la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, criticó hoy la actitud de la compañía aérea desde el mismo momento de la tragedia. Para Álvarez, la obligación de Spanair era "publicar la lista de pasajeros" y "no lo hicieron bien". La titular de Fomento señaló que los directivos de la aerolínea "no tenían la certeza de que los de la lista eran los que hubiesen embarcado y no supieron responder. Nosotros no podíamos hacer nada porque esas listas las tienen sólo las compañías así que lo único era exigírselas y que vinieran a dar la información y la cara", declaró durante su intervención, en la que pidió tranquilidad "hasta que lleguen los resultados de la investigación".