El Jueves Santo en Baena, a pesar de no haber desfiles procesionales, está repleto de actos como suele ser tradicional en este día sin descanso. La iglesia de San Francisco acogía por la mañana las Confesiones, que se han realizado cumpliendo con todas las normas anti covid establecidas, si bien no ha sido posible la emocionante recogida de la Turba de la Cola Negra.
Ya en la tarde, las distintas parroquias acogen la celebración de los Santos Oficios, para posteriormente, tener lugar en la iglesia de Santa Marina un acto organizado por la Ilustre Archicofradía de la Vera Cruz y Nuestro Padre Jesús del Prendimiento, que tradicionalmente procesiona en este día.
En un bello altar con cada una de las imágenes que conforman la Archicofradía, las distintas hermandades ven entrando al templo en periodos de diez minutos para, junto con sus hermanos y respetando siempre el aforo establecido, dedicar unas ofrendas y oraciones a sus titulares.
De igual forma, tras este acto recoge el testigo la Cofradía del Santísimo Cristo del Perdón, que traslada su Vía Crucis al interior de la iglesia de Santa María la Mayor. Este año no se puede oir el sonar de las cadenas de sus hermanos, ni los ecos de los tambores roncos, pero la Pasión de Cristo es revivida igualmente con gran recogimiento y solemnidad.
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