La inesperada lluvia que ha arreciado a primera hora de la mañana ha obligado a la hermandad del Carmen a suspender el traslado de la Patrona hasta el cementerio de la ciudad, donde iba a presidir la eucaristía del Día de los Fies Difuntos. 

El mal tiempo frustra así la que iba a ser la primera salida de la Virgen del Carmen desde el comienzo de la pandemia, un acto que no solo coincidía con la conmemoración del Centenario del Patronazgo sino que además se revestía de un significado especial al tratarse del Día de los Difuntos: que la Patrona acudiera al camposanto a rezar por los fallecidos en su primera salida tras año y medio de una crisis sanitaria que en La Isla se ha cobrado más de un centenar de vidas y ha dejado momentos verdaderamente dramáticos hacia desde luego que no fuera una simple salida más. 

Minutos después de las ocho y media, que era la hora a la que estaba previsto que se iniciara el traslado, el hermano mayor de la hermandad, Salvador Fornell, y el prior de los carmelitas descalzos, Serafín Galindo, acompañados de la junta de gobierno, han informado a los fieles presentes en la iglesia de la decisión de suspender esta salida.

La misa de los Difuntos que se celebra a las 11.00 horas en el cementerio también se ha trasladado al interior de la cercana parroquia de San José Artesano.