Lasociedad Española de Endocrinología nos avisó antes de las Navidades de la previsión de que estas fechas podrían suponer un aumento del peso en la mayor parte de la población de unos 4-6 kilos por persona.

Esta era una previsión basada en la experiencia de años anteriores y en el conocimiento de que es una realidad bastante generalizada que en Navidad se abusa de ingerir más comida y más dulces de lo habitual. Bien, pues aunque no estoy en condiciones de afirmar que se haya cumplido la predicción al 100%, es más que probable que seamos miles y miles las personas que hemos acumulado algún kilo de más en estas vacaciones navideñas.

Podría ser una información anecdótica pero, más allá de este tipo de consideracion, la realidad es que muchas personas tienen hoy el reto de tratar de recuperar el peso anterior a la Navidad. Y muchas personas se están planteando iniciar algún plan de comidas para perder peso, hacer deporte y otras estrategias.

Seguramente estas próximas semanas se caracterizarán por una especie de lucha contra el hambre por la dieta o contra la pereza de hacer deporte y muchos, terminaran perdiendo la batalla frente a los kilos navideños.

El problema es que esto no deja de ser un fiel reflejo del tipo de sociedad en la que estamos inmersos y cuyos hábitos de vida son un gran condicionante para la preocupante realidad de obesidad y sobrepeso que tenemos en España y en Andalucía ; una realidad que ha condicionado la elaboración del proyecto de ley contra la obesidad que ha aprobado el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía.

Este es un asunto serio como ya hemos tenido ocasión de comentar en alguna ocasión en estas páginas porque, en verdad, la prevención de la obesidad es un gran y difícil objetivo ante los estilos de vida prevalentes en nuestros días.

En cualquier caso y como no hay mal que por bien no venga, la preocupación que ahora manifiestan muchas personas por tratar de recuperar el peso de antes de la Navidad es una oportunidad para concienciarnos de la importancia de mantener y desarrollar unos hábitos saludables.

Hábitos saludables que se deben sustentar en una alimentación sana y equilibrada para la que estaría bien solicitáramos asesoramiento a nuestro médico de cabecera; también es necesario desarrollar unos hábitos sanos en lo referente al ejercicio físico en cuyo desarrollo es bueno disponer del adecuado asesoramiento. La concienciación social, el apoyo profesional y el desarrollo de políticas públicas que favorezcan conocer las medidas preventivas y hacer fáciles los hábitos saludables son elementos necesarios no solo para acabar con los kilos de más de esta navidad, sino también para prevenir eficazmente el sobrepeso y la obesidad. Que haya suerte.