Invertir en educación es garantía de futuro. Los sindicatos lo tienen muy claro y, por ello, temen que la crisis económica se traduzca en un retroceso en los avances anunciados para los próximos años. Ya están vigilantes y no dudarán en salir a la calle. FETE-UGT sospecha que la crisis llevará a externalizar algunos servicios extraescolares, ya que suele ser una opción más barata para su puesta en marcha. Y, como CCOO, teme que el aumento de plantilla pactado se destine a cubrir otras necesidades. ANPE se adelanta y exige más dotación presupuestaria alertando de la repercusión que la inestabilidad económica puede tener sobre el sistema. Y, todos en general, recuerdan que hay otras necesidades y hay que seguir avanzando, por ejemplo, en la aprobación del Estatuto del Docente, el desarrollo de la nueva FP o la etapa de Infantil, flecos pendiente del año pasado. En medio de la que se avecina, las asociaciones de padres de alumnos, representadas por Codapa, se alegran de que la gratuidad de los libros de texto se haya extendido este curso y que se hayan ampliado también al transporte escolar en Bachillerato y FP. “Una familia con dos hijos se puede ahorrar más de 350 euros”, comenta Pilar Triguero, presidenta de Codapa.