La imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno regresará a Baena el próximo domingo 26 de agosto después de que abandonara la iglesia conventual de San Francisco, sede canónica de la cofradía, para ser restaurado por el egabrense Salvador Guzmán Moral. Con motivo de su vuelta a la localidad se va a celebrar una eucaristía de acción de gracias y, tras la misma, un besapiés a la imagen.

La salida de Nuestro Padre Jesús Nazareno se produjo hace aproximadamente un mes, cuando la imagen abandonó la iglesia de San Francisco para dirigirse hasta el taller del restaurador egabrense para ser reparada. El hermano mayor de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, José Ortiz Esquinas, informaba en ese momento de las necesidad de esta restauración, ya que en la imagen se podía observar un "oscurecimiento de los barnices amarillos que se le aplicaron para la protección de la talla, lo que está provocando la aparición de numerosas manchas que están deteriorando la calidad de la imagen, afectando a la madera y a su policromía".

Asimismo, Ortiz detalló que entre las zonas más afectadas por este deterioro de la policromía, se encontraban también las manos, que están muy afectadas principalmente por el roce de la cruz al procesionar, así como los pies, por el efecto del besapiés que se realiza cada año entre los fieles. También se han detectado "unas grietas en la madera perteneciente a las piernas y la cabeza, que se van a estudiar para ver si son de los propios ensambles o que han aparecido ahora".

Los trabajos se han desarrollado durante los pasados meses de julio y agosto, por lo que durante ese periodo la imagen de Jesús Nazareno ha sido retirada del culto en la iglesia conventual de San Francisco, su templo. La última restauración que se realizó a la talla fue en el año 2010, en la que se sustituyó la peana y se procedió a dar unos retoques en la policromía en las zonas de la cara y las piernas.