Más allá de los daños provocados, con más de 200 incidencias en toda la provincia gestionadas por el teléfono de emergencias 112 desde la tarde del jueves, el paso del temporal Elsa por Córdoba ha servido para darle una tregua a los pantanos. Y es que, según los datos facilitados por el Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) de la cuenca del Guadalquivir, los embalses han recibido en las últimas horas más de 200 hectómetros cúbicos de agua. Ahora, con 1.231 hectómetros acumulados, las reservas hídricas han aumentado un 21% respecto a hace apenas una semana.

Los embalses cordobeses tienen una capacidad de 3.411 hectómetros, y ahora se encuentran al 36,22% de su capacidad. Al inicio del año hidrológico, el 1 de octubre, apenas mantenían un volumen de 1.013 hectómetros, el 29%, por lo que la situación de sequía empieza a menguar.

Por embalses, Iznájar y La Breña se encuentran al 37% y al 21% de su capacidad, respectivamente. El primero posee 363 hectómetros cúbicos embalsados y el segundo, 176. En octubre de 2013, Iznájar, el pantano de mayor capacidad de toda Andalucía, llegó a estar al 80%, con 788 hectómetros cúbicos. La CHG gestiona en la provincia 13 presas. Tras las dos citadas anteriormente, las que acumulan mayor volumen son Bembézar, con 163 hectómetros –el 47% de su capacidad–, y Yeguas, con 96 hectómetros –el 41% del total–.

Villa del Río sigue limpiando

Mientras, la localidad de Villa del Río intenta recuperar la normalidad. Cuatro máquinas trabajaron ayer a contrarreloj para finalizar las labores de limpieza y borrar los daños causados por el paso del temporal el jueves y el viernes, que dejó más de 80 litros por metro cuadrado y obligó a desalojar más de 200 empresas por la subida de los arroyos Cañetejo y Salado.

El alcalde villarrense, Emilio Monterroso (PSOE), explicó que los operarios mantuvieron ayer su labor en la carretera de Cañete de las Torres, la zona del viaducto, los Huertos Familiares y los polígonos industriales de la Vega y el Anzarino. El objetivo es que este lunes el Ayuntamiento pueda realizar la evaluación de los daños, pues como mínimo se ha perdido la maquinaria de la piscina por la llegada del agua. La peor situación se vivió el viernes, cuando bomberos del parque de Montoro y efectivos de la Guardia Civil tuvieron que rescatar a una persona que se había quedado atrapada en su vehículo en medio de un torrente de agua, aunque afortunadamente todo quedó en un susto.

La localidad también temió por el Puente Romano, que será objeto de una evaluación para comprobar si se ha dañado su estructura. La histórica pasarela sobre el arroyo Salado quedó engullida por las aguas el pasado viernes, aunque ya ha vuelto a emerger. En el entorno se acumulan lodos y numerosos restos vegetales.

Por otra parte, las dos carreteras que permanecían cerradas como consecuencia del temporal, la CO-4207 entre Montilla y Montalbán, y la A-386, en el término municipal de Santaella, ya han recuperado la normalidad del tráfico, según consta en la web de la Dirección General de Tráfico (DGT).