La renta agraria ha caído en Córdoba un 23,6 por ciento en los últimos cinco años. El secretario provincial de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), José Luis Gutiérrez, destacó ayer este porcentaje en el balance que la organización que dirige hace del ejercicio 2007, "un año agrario que ha tenido sus luces y sus sombras", relató. No obstante, insistió en que 2007 se cerró con un incremento de la renta general del sector de un 9,8 por ciento respecto a la de 2006.

Esos datos contrastan con los facilitados tan sólo un día antes por el delegado provincial de Agricultura, Francisco Zurera, en su balance anual del pasado año y de los que se desprendía que corrían buenos tiempos para el campo cordobés -no tan buenos, según UPA-. Zurera aseguró que la producción agraria creció un 3,2 por ciento en 2007 hasta alcanzar los 1.133 millones de euros. El delegado matizó que los últimos cuatro años han sido de constante crecimiento incrementándose en total la producción agraria "en un 30,5 por ciento".

"Después de los fuertes descensos de años anteriores, este incremento de la renta agraria no ha impedido que vuelva a descender el empleo en el campo", subrayó sin embargo Gutiérrez, quien puntualizó que durante el pasado año el agro cordobés perdió 1.085 activos. "Más de 7.000 si nos referimos a toda Andalucía", añadió Gutiérrez. El responsable provincial de UPA destacó que los datos generales del sector esconden evoluciones muy dispares entre producciones. Así, frente al incremento de casi un 60 por ciento en el valor de producción de los cereales, se han registrado descensos de un 18,5 en el coste productivo de los conejos, de un 12 por ciento en el del vacuno de carne o de un 7,7 por ciento en el valor de producción del ovino y caprino, "los tres sectores ganaderos más afectados por la crisis". "Ese incremento del 60 por ciento en el precio del cereal sitúa al producto con el mismo valor que tenía en 1986; y es que los precios del cereal han estado muy mal", añadió el secretario provincial de UPA.

Gutiérrez habló de "año negro ganadero" provocado por "la epidemia de lengua azul y el alto coste de los piensos -algo que también destacó Zurera-, entre los factores más determinantes" y aprovechó para demandar mayor celeridad en hacer efectiva la percepción de las ayudas por parte de los productores. "Es pronto para hacer balance de lo que ha supuesto la epidemia, ya que la ganadería está pendiente de esas ayudas y si no llegan pronto muchos productores van a tener que abandonar la actividad", sentenció.

Respecto al sector del olivar, Gutiérrez destacó que el precio del aceite de 2007 ha sido muy parecido al de "hace 12, 14 ó 15 años, con la diferencia de que hoy en día el agricultor necesita más dinero para producir un kilo, lo que significa que ese precio no es tan bueno". El secretario detalló que el precio del aceite puede ser rentable para algunas zonas de Córdoba "pero para el 65 por ciento de la provincia no sería rentable si el agricultor no cobrara las ayudas de dos euros por kilo", relató. Desde UPA pretenden que Córdoba tenga cuantas más hectáreas de regadío de olivar mejor. "Es necesario que la Administración se implique en el aumento de la superficie de riego, ya que está comprobado que el olivar que se riega incrementa su producción en un 50 por ciento", apuntó.