La segunda jornada de búsqueda de Jorge Alamillo Malavé, el vecino de 41 años de Valverde del Camino desaparecido el domingo mientras daba un paseo por la aldea beasina de Candón, tampoco ha logrado dar resultados. Las batidas se retoman hoy a las 8:00.

En el operativo de rastreo están participando alrededor de 200 personas, entre familiares, amigos, compañeros de trabajo, vecinos de los municipios colindantes, voluntarios de Protección Civil y agentes de la Policía Local y la Guardia Civil, que ha aportado a la exploración medios aéreos y caninos para poder encontrarlo con vida.

La búsqueda se ha centrado este lunes en los cinco kilómetros del extrarradio de la aldea y a partir de ahí el operativo ha avanzado en círculos concéntricos hacia los términos municipales anexos. “Nos hemos dividido por zonas y en grupos de diez personas”, ha informado el alcalde de Beas, Diego Becerril, quien ha detallado que el helicóptero y la unidad canina del Instituto Armado también están peinando la zona.

Las batidas organizadas se han venido desarrollando desde el día de la desaparición a pie, a caballo y en vehículos motorizados. Una colaboración que se ha visto fortalecida tras la incorporación en la tarde de este lunes de los integrantes del Motoclub Valverdeño, que no han dudado en subirse a sus máquinas para explorar mayor extensión de este terreno candonero.

Jorge, que salió a las 09:00 de su casa para andar por el entorno natural de Candón, tuvo a las 12:00 la última comunicación con su familia. Así lo ha confirmado el regidor beasino, quien ha revelado que habló por teléfono con su madre, a la que aseguró que estaba emprendiendo el camino de regreso y que se encontraba en ese momento cerca del término triguereño, de ahí que la primera batida en la tarde del domingo se hiciera por esta zona.

Voluntarios en la búsqueda salen de la casa hermandad San José.

La última persona que lo vio, según el alcalde de Beas, fue el dueño de una finca al norte de Candón, quien asegura que se lo encontró en el interior de su propiedad y le condujo hasta una portada para mostrarle el camino de vuelta al casco urbano de la aldea, por lo que se entiende que estaba algo desorientado en ese punto del trayecto.

Pese a estar empadronado en Valverde, Jorge tiene una vinculación muy fuerte con esta aldea beasina, donde pasa la mayor parte de su tiempo libre. “Salió a pasear como de costumbre y es un gran conocedor de la zona, por lo que no sabemos qué le podría haber ocurrido para no volver a su vivienda”, lamenta Becerril, quien desconoce si padece alguna enfermedad.

El centro de coordinación del dispositivo de búsqueda se ha instalado en la casa de la Hermandad San José Obrero de Candón, donde los voluntarios pueden refrescarse para soportar el sofocante calor que está acompañando al rastreo. Tanto el alcalde de Beas como la regidora valverdeña, Syra Senra, han formado parte de esta unidad y han puestos los servicios municipales a su disposición.