La Diputación se ha echado ya sus propias cuentas del empleo que generará en Córdoba la puesta en marcha del nuevo servicio de ayuda a domicilio adaptada a la ahora embrionaria Ley de Dependencia. El presidente de la institución provincial, Francisco Pulido, aseguró ayer que "en la actualidad hay alrededor de 450 auxiliares que prestan esa ayuda a domicilio y la perspectiva es la de ampliar en 150 la plantilla entre 2009 y 2010"; o lo que es lo mismo, un 33%. Y es que las previsiones que baraja la Diputación pasan por que el nuevo servicio comience a prestarse en los 67 municipios cordobeses menores de 20.000 habitantes, dirigido por el Instituto Provincial de Bienestar Social, a partir del próximo enero.

Para ello, los ayuntamientos de esas localidades deberán aprobar en Pleno el convenio al que ya le ha dado el visto bueno, también en sesión plenaria, la Corporación provincial y que deja la gestión del servicio a los propios ayuntamientos. "Es lógico que, aunque preveíamos que ese inicio del nuevo servicio podría ser efectivo en octubre, lo pongamos en marcha en enero coincidiendo con un nuevo ejercicio presupuestario y dándole tiempo así a los ayuntamientos a que se sumen al convenio", justificó entonces la vicepresidenta del Instituto y diputada provincial de Servicios Sociales, Reyes Lopera.

Mediante la firma, los consistorios se comprometerán al cumplimiento de la Ley de Dependencia, así como a la acreditación y homologación de auxiliares, empresas o cooperativas a las que se les asignará el servicio. El convenio obliga además al Instituto a la coordinación, financiación, seguimiento y control de la prestación en los ayuntamientos firmantes. En el caso de que un determinado consistorio no quiera sumarse al convenio, circunstancia que dudan desde la propia Diputación, será el Instituto el que asuma directamente la gestión directa en ese municipio.

Pulido insistió -durante un adelanto de lo que será el trabajo del equipo de gobierno socialista de la institución en el curso político 2008-2009- que uno de los principales objetivos será la puesta en marcha del nuevo programa. "Se trata de una iniciativa que contará el próximo año con más de cinco millones de euros para que los ayuntamientos presten ese servicio que garantizará la atención a quienes lo necesitan y el fomento del empleo", resaltó. Lopera ya cuantificó en 7,5 millones el presupuesto con el que se espera contar en 2009. El Instituto Provincial de Bienestar Social atiende a 404 usuarios de ayuda a domicilio con cargo a la Ley de Dependencia y a más de 1.400 usuarios con cargo al servicio de prestación básica.