Por tercer año consecutivo, la aldea mellariense de Navalcuervo se ha transformado este fin de semana enBelén. Toda la población ha vivido el nacimiento de Jesús a través de 24 localizaciones en la totalidad de sus calles, iluminadas en su mayoría por decenas de antorchas y algún que otro foco para recrear el mejor de los ambientes. Los responsables de este montaje histórico han sido los miembros de la Asociación de amigos y vecinos de Navalcuervo y los de la asociación juvenil Los de la perrilla".

Para ello han contado con la colaboración del Grupo de Teatro La Tramoya de Fuente Obejuna y la también mellariense Peña hípica Virgen de Gracia, así como con el Ayuntamiento de Fuente Obejuna, la Mancomunidad de Municipios Valle del Guadiato" y la Diputación. Pero nada de esto hubiera sido posible sin la aportación humana de unas 200 personas, entre personajes y trabajadores entre bambalinas, de todas las edades y de varios pueblos de la comarca, verdaderos y únicos protagonistas de esta representación histórica.

Al margen de los protagonistas históricos de esta representación -el Niño Jesús ha sido Idaira Gómez, de dos meses- no han faltado la guardia personal de Herodes, al ángel en la Anunciación a los pastores, lavanderas, aguadores, mercaderes, posaderas, herreros, zapateros, carpinteros, panaderos, bordadoras, harineras o hilanderas, personajes que ocupaban cada una de las calles haciendo gachas, un perol de carne, migas, jabón de aceite, asando castañas, embutidos y quesos. Eso sí, todos los instrumentos utilizados para la realización de los oficios y menesteres diarios eran originales, algunos con más de usiglo de antiguedad.