Campiña Este

El hogar del pensionista de Baena ya no tiene barreras arquitectónicas

  • El Ayuntamiento ha invertido 41.000 euros, financiados por la Diputación

María Carmen Burrueco y Cristina Piernagorda.

María Carmen Burrueco y Cristina Piernagorda. / S. Núñez

El Ayuntamiento de Baena ya ha finalizado las intervenciones realizadas en el hogar del pensionista de la calle Alta en materia de eliminación de barreras arquitectónicas, tras una inversión de 41.000 euros, que han sido financiados por la Diputación de Córdoba.

La alcaldesa, Cristina Piernagorda (pp), ha indicado que estas obras eran “muy necesarias” porque las personas mayores con problemas de movilidad no podían acceder a las diferentes plantas del edificio y por tanto no podían participar en las actividades que se organizaban en el centro.

Piernagorda ha añadido que además se ha adecuado a la normativa actual el baño del centro y se ha adaptado para minusválidos y ha insistido en que “aunque aún quedan algunas cosas por hacer en el edificio, se van a ir estudiando para que finalmente el Hogar del Pensionista tenga cubiertas todas sus necesidades”.

Por su parte, la presidenta del hogar del pensionista municipal, María Carmen Burrueco, ha detallado que “las obras del ascensor concluyeron hace algunos meses, así como el montacargas, que era muy necesario porque el ascensor presentaba el problema de que no llegaba a la segunda planta en la que están ubicados tanto los servicios como la sala de ordenadores”.

Burrueco ha señalado que “también se ha llevado a cabo la ampliación de la cafetería, cuya obra ha corrido a cargo del encargado de la hostelería, si bien el Ayuntamiento ha pagado los materiales”, lo que ha permitido salvar un escalón que había y que ya era una barrera para los usuarios.

La presidenta del Hogar ha mostrado su satisfacción porque el centro está recuperando “la normalidad” tras la pandemia y ha indicado que tienen actividades tanto por la mañana como por la tarde, entre las que destacan los talleres de coro, punto, corte y confección, manualidades y un aula de lectura donde muchas personas mayores están aprendiendo a leer y escribir.

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