La familia de Ángeles Zurera, la vecina de Aguilar desaparecida hace más de dos meses, ha decidido personarse como acusación particular en el juicio que está pendiente de celebrarse contra el ex marido de la mujer, al que se le imputa un presunto delito de malos tratos. El ex marido de Ángeles estuvo detenido 72 horas y, posteriormente, fue puesto a disposición judicial, para que aclarara una supuesta agresión que habría cometido contra Ángeles Zurera unos días antes de que ésta desapareciera. La Guardia Civil tuvo conocimiento de este episodio de maltrato a raíz de las investigaciones que está realizando sobre la desaparición de Ángeles, lo que le llevó a constatar, a través de un parte médico del Hospital de Montilla, que la mujer había sido agredida por su ex pareja el día 19 de febrero. No obstante, la presunta víctima no había denunciado el suceso y ocultó a los profesionales médicos las verdaderas causas de sus lesiones.

Una vez que el ex marido de Ángeles declaró ante el juez en Aguilar de la Frontera fue puesto en libertad con cargos. Tras conocer lo ocurrido, el hermano de la desaparecida, Antonio Zurera, declaró que no tenía constancia de que Ángeles fuese víctima de violencia de género, pero la familia quiere ahora que el presunto agresor reciba la "máxima pena que la ley contempla para estos casos", afirma Zurera, quien añade que "la plataforma nos está apoyando en nuestra decisión". Precisamente, la plataforma de amigos de Ángeles, constituida recientemente para apoyar a la familia, invitó a la última manifestación celebrada en el municipio a las asociaciones de mujeres de todo el país. En esta última marcha, participaron en torno a 5.000 personas, por lo que los vecinos de Aguilar dejaron de nuevo patente su solidaridad con la familia. Por su parte, la Guardia Civil prosigue su investigación para localizar a la desaparecida.