El Ayuntamiento de Peñarroya-Pueblonuevo intentará por enésima vez la recuperación del suelo del Cerco Industrial. El alcalde peñarriblense, José Ignacio Expósito (PSOE), ha anunciado la creación de una comisión para analizar las propuestas de las empresas que están interesadas en recuperar este terreno. El grupo de trabajo estará compuesto por un representante de cada uno de los grupos que conforman el plenario municipal: PSOE, UDPñ, PP e IU.

Expósito dio a conocer que en la actualidad hay dos empresas interesadas en aprovechar los residuos que hay en el suelo, una de las cuales es Tirol 2002, que ya lo intentó en el anterior mandato con el PP en la Alcaldía. Expósito destacó que la firma "insiste en que había llegado a un preacuerdo con el anterior equipo de gobierno para sacar unos pliegos de cesión de estos suelos y que en un determinado momento la anterior alcaldesa, María Gil, decidió paralizar el proceso".

El alcalde concretó que su equipo ha planteado una reunión conjunta con todos los grupos políticos que conforman la corporación para analizar el proyecto. Este encuentro servirá para que las promotoras informen de primer mano de "en qué consiste el proyecto y cuáles son las intenciones que tienen". Expósito instó, además, a concretar "hechos". "No vale con decir que van a generar 300 puestos de trabajo, sino que nos demuestren que eso es factible", dijo. El regidor reconoció que el equipo de gobierno tiene "serias dudas", por lo que su objetivo es "hacer partícipes al resto de grupos", para que la decisión no sea exclusivamente del PSOE. "Entre todos -explicó- valoraremos el proyecto y tomaremos una decisión conjunta y unánime para decidir si estimamos o desestimamos este proyecto, en el caso de que consideremos que no es viable".

Desde que el Ayuntamiento adquirió el Cerco Industrial, que ocupa una superficie de 600.000 metros cuadrados, los diferentes equipos de gobierno han intentado recuperar el terreno, cerrado al municipio. Así, en junio de 2011, la firma Boston Grup también mostró su interés en descontaminar estos terrenos para el aprovechamiento de los metales que hay en las escorias, lo que permitiría la limpieza de los suelos de forma gratuita para el Ayuntamiento.

La compañía solicitó la cesión del uso de las escorias y, a cambio, se planteaba convertir la superficie en el parque de la fundición, en el que se respetarían las edificaciones de interés.

El proyecto de esta firma incluía, además, la construcción de dos parques infantiles, un edificio para convenciones y exposición, un centro de día para personas mayores, dos guarderías, además de medio centenar de viviendas de protección oficial, una estación de autobuses e, incluso, una escuela municipal.

La puesta en marcha de este proyecto contaba con una inversión de nueve millones de euros, que aportaría la Sociedad Mercantil Minerías metálicas europeas, que llevaría a cabo las actuaciones en el plazo de ocho años. Este proyecto centró el interés del anterior equipo de gobierno peñarriblense, que llegó a mantener varias conversaciones para intentar convertirlo en realidad. Sin embargo, la empresa y el Ayuntamiento no llegaron a ningún acuerdo y el proyecto no salió adelante.