puerto del calatraveño

Los otros candidatos a Patrimonio Mundial

  • Arranca la cuenta atrás para que Medina Azahara sea reconocida por la Unesco como un bien excepcional, aunque Córdoba tiene otras aspiraciones: el paisaje del olivar y las tamboradas

Olivares sin fin en plena campiña.

Olivares sin fin en plena campiña. / el día

Córdoba vive estos días entre la ilusión y la expectación la declaración del yacimiento arqueológico de Medina Azahara como Patrimonio Mundial por parte de la Unesco, una candidatura en la que se han volcado desde el Ayuntamiento de la capital hasta la Junta de Andalucía, titular del bien; desde la Diputación de Córdoba hasta el tejido asociativo de la ciudad, municipios, creadores y asociaciones de vecinos. Tal reconocimiento, que ya cuenta con el visto bueno del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos), paso previo ineludible, tendrá lugar si todo sale según lo previsto a finales de mes en la capital de Baréin, Manama, donde el comité del Patrimonio Mundial examinará una treintena de sitios culturales, naturales y mixtos de todo el planeta.

La inclusión de Medina Azahara en la lista de la Unesco, desde luego, es una excelente noticia. Como en su momento lo fueron el reconocimiento de la Mezquita-Catedral, el Centro Histórico de Córdoba o la Fiesta de los Patios. Falta ahora que las administraciones competentes hagan un plan serio para preservar el bello paisaje que rodea el yacimiento arqueológico pese a las parcelas; mejorar las conexiones para que llegar al monumento no se convierta en una odisea para los turistas; plantear un programa de excavaciones a largo plazo para mejorar el conocimiento científico que se tiene sobre las ruinas y, sobre todo, es necesario un plan de marketing potente que sitúe a Córdoba, a Medina Azahara, a todo lo que tenemos que ofrecer en la primera división del turismo mundial.

El toque de tambor, típico de Baena, ya intentó en 2014 lograr el reconocimiento

Aunque las aspiraciones de la provincia no terminan ahí. Córdoba también forma parte de dos expedientes que se presentarán en próximas sesiones de la Unesco: el paisaje del olivar y las tamboradas -este último bien, de carácter inmaterial, está protagonizado por Baena y los municipios que hacen del toque del tambor y el bombo señas de identidad de su cultura-.

Respecto al paisaje de olivar, Córdoba aspira a proteger 10.993 hectáreas, ampliadas a 101.100 si se tiene en cuenta la zona de amortiguamiento. Los municipios incluidos son Luque, Zuheros, Cabra, Doña Mencía, Lucena, Carcabuey, Priego de Córdoba, Almedinilla, Montoro, Adamuz, Pozoblanco y El Carpio. La aspiración, no obstante, es mucho mayor, y abarca buena parte del territorio de Jaén y parte de Granada, Málaga, Cádiz y Sevilla. El recorrido abarca los acebuchales de Cádiz; los olivares vetustos y milenarios de Álora y Periana en Málaga; el olivar nazarí del Valle de Lecrín en Granada; el patrimonio arqueológico y productivo que se representa en ciudades medias cordobesas como Lucena, Priego de Córdoba y Cabra; el olivar de montaña y en terrazas y la piedra seca de Sierra Mágina; el de las haciendas sevillanas, vinculado a la aceituna de mesa; el más reciente y de regadío en la Hacienda La Laguna de Baeza, o el protagonismo del Guadalquivir, desde el olivar de Montoro y El Carpio, hasta la Sierra Morena en Adamuz o Pozoblanco.

En cuanto a la candidatura de las tamboradas, optó por primera vez a Patrimonio Mundial en 2014, pero en el último momento se optó por retirar el expediente para completarlo. En este bien inmaterial de rituales de toques de tambor participan Andalucía -Baena es el únicomunicipio-, Aragón, Castilla-LaMancha, Murcia y Valencia, hasta sumar 17 localidades y 200.000 personas. La candidatura asocia lugares dentro del Estado español en los que se celebran rituales que consisten en el "toque intenso y continuado del tambor y bombo de forma simultánea y colectiva, en un espacio público, generalmente en el marco temporal o ritual de la Semana Santa y coincidiendo con sus lugares de desarrollo". Suerte para los próximos años.

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