castro del río

Igualdad denuncia la reforma de la calle Corredera por no cumplir la ley de accesibilidad

  • La Junta justifica que el tamaño del acerado dificulta el paso en casos de movilidad reducida

Una mujer en silla de ruedas, en el nuevo acerado.

Una mujer en silla de ruedas, en el nuevo acerado. / el día

La polémica reforma de la calle Corredera de la localidad de Castro del Río continuará en los juzgados. La Consejería de Igualdad y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía ha presentado una denuncia ante los juzgados de lo Contencioso Administrativo de Córdoba contra el acuerdo del Pleno castreño que optó por limitar el tamaño de los acerados para mantener unos aparcamientos pese a que esta decisión suponía incumplir la vigente normativa de accesibilidad. La denuncia ya ha sido admitida a trámite.

La reforma de la calle Corredera, en la que el Ayuntamiento invirtió 420.000 euros, se debate desde el principio entre obedecer a la normativa de accesibilidad o mantener los espacios de aparcamiento. Tal fue la polémica que surgió a principios de año entre los vecinos que el equipo de gobierno, de IU, optó por convocar un Pleno extraordinario para definir las obras, que habían arrancado a mediados de octubre.

La sesión tuvo lugar el 20 de febrero y, en ella, la corporación optó por mantener el doble sentido de circulación de la calle y una línea de aparcamiento completa, pese a que ello suponía reducir el tamaño de los acerados hasta el punto de limitar el acceso para personas con movilidad reducida. Es el acuerdo plenario que el servicio jurídico de la Administración autonómica acaba de llevar al juzgado.

La polémica surgió después de que un particular remitiera un escrito a la Dirección General de Personas con Discapacidad de la Junta de Andalucía para advertir de que el proyecto de obra incluía la reducción de la anchura de las aceras, que pasarían de 1,70 metros a 1,33 metros. La norma regional fija en 1,50 metros la medida mínima para los itinerarios peatonales accesibles, mientras que el Gobierno central pone el mínimo en 1,80 metros cuando las dimensiones de la calle lo permiten. Según el particular, la Corredera cuenta con una distancia entre fachadas "bastante generosa" como para dar cumplimiento a los decretos de accesibilidad, como así se lo hizo llegar al Ayuntamiento castreño a mediados de enero el director general de Personas con Discapacidad de la Junta de Andalucía, Gonzalo Rivas.

El presupuesto de las obras ascendía a alrededor de 420.000 euros, de los cuales cerca de 100.000 se destinaron a la adquisición de los materiales necesarios y el resto a la contratación de mano de obra. Según el informe redactado en su momento por el Consistorio, esta calle, de alta densidad en lo que a tráfico rodado y peatonal se refiere -puesto que es una de las vías de entrada a la céntrica plaza San Fernando-, se encontraba en precario estado, sobre todo en lo referente al pavimento de la calzada y las terminaciones de acerados y bordillos. Debido a lo controvertido de la reforma, en octubre del año pasado el Consistorio mantuvo una reunión informativa con los vecinos para informar de la actuación que se llevaría a cabo y recoger sugerencias al respecto del mismo, sin que entonces surgiera polémica alguna.

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