La Denominación de Origen Protegida de Baena ha cerrado la ronda de encuentros con los grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados y del Senado para advertir de las “amenazas del sector”, así como instar a que “administraciones y partidos políticos hagan un frente común por el aceite de oliva”.

En concreto, se han realizado una serie de contactos con todos los grupos parlamentarios a los que en nombre de la Sectorial Nacional de Denominaciones de Origen Oleícolas se les ha pedido que “desde las instituciones se fomenten soluciones para ser más competitivos en el mercado internacional y se elabore una estrategia de difusión acorde a la dimensión del aceite de oliva virgen”.

Desde el Consejo Regulador han considerado que “si somos la primera potencia mundial hay que mostrarlo desde el sector y que sea asumido por el consumidor” y han defendido que “es un producto del que un país y cada ciudadano debe sentirse orgulloso” aunque han lamentado “la falta de un apoyo decidido por parte de los grupos políticos y la sociedad civil”.

En este sentido, han subrayado que “es necesario un mayor compromiso y exigencia en la difusión de las bondades saludables de los aceites de oliva virgen a través de campañas publicitarias y de una mayor y mejor presencia en los medios de comunicación públicos”.

En estos encuentros también se ha hecho saber que “es necesario incorporar las bondades saludables de los aceites de virgen extra en el etiquetado como información al consumidor”, algo que han tildado de “fundamental” tras “la desastrosa aplicación de Nutriscore y toda la confusión que generó el Ministerio de Consumo”.

En materia de competitividad, han incidido en que “hay que hacer un esfuerzo por ser altavoz del papel de las denominaciones de origen, como la DOP Baena, que son garantes de la calidad de un producto que marca la diferencia” y tras la entrega de un documento resumen de las propuestas planteadas, se ha hecho hincapié en “la esperanza en la buena disposición y atención de los grupos políticos”.