Provincia

La A-4 recupera la limitación a 120 por hora entre la capital y Pedro Abad

  • La Subdelegación calcula que las obras de mejora del firme de la autovía finalizarán a mediados de octubre

  • La restricción se ha levantado coincidiendo con el puente de agosto

Señales verticales de limitación a 120 kilómetros por hora, ayer a la salida de Córdoba capital.

Señales verticales de limitación a 120 kilómetros por hora, ayer a la salida de Córdoba capital. / jordi vidal

Tras algo más de tres meses de limitaciones por el mal estado del firme, que agudizaron las lluvias de primavera, la autovía A-4 empieza a retomar la normalidad. El Ministerio de Fomento ha autorizado devolver a 120 kilómetros por hora el límite de velocidad en 32 kilómetros de la Autovía del Sur, en concreto en el tramo entre Córdoba capital y la localidad de Pedro Abad; en el resto del trazado de la A-4 a su paso por Córdoba, todavía no se pueden superar los 100 kilómetros. Fuentes de la Subdelegación del Gobierno informaron de que las obras de reparación del firme entre este municipio y Villa del Río, en el límite con la provincia con Jaén, continuarán hasta principios de septiembre.

La actuación consiste en el fresado de las zonas más deterioradas, la retirada del material a vertedero, la extensión de nueva mezcla bituminosa y el pintado de las marcas viales. Las obras de emergencia contemplan el fresado de una superficie de más de 290.000 metros cuadrados y la extensión de más de 35.000 toneladas de mezcla bituminosa. El Gobierno central invertirá 3,5 millones de euros en reparar toda la autovía a su paso por Córdoba. Está previsto que las obras continúen al menos hasta mediados de octubre, cuando está previsto que finalice la mejora del tramo entre Córdoba capital y La Carlota, calcularon desde la Subdelegación.

Las señales verticales de limitación a 120 kilómetros por hora, la velocidad máxima permitida en cualquier autovía, ya eran visibles ayer en el tramo entre la capital y Pedro Abad. A principios de mayo, los operarios de mantenimiento de carreteras instalaron un total de 80 señales para advertir del estado irregular de la calzada a lo largo de un trayecto de 87 kilómetros, lo que pilló por sorpresa a muchos conductores. Pese a que la Subdelegación del Gobierno insistió entonces en que la reducción no se trataba de una medida recaudatoria, las redes sociales se llenaron de críticas contra los radares móviles que en los días posteriores se vieron recorriendo la carretera.

En algunos tramos de su recorrido por Córdoba, la A-4 soporta el paso de más de 30.000 vehículos al día. Es el caso de la variante de la capital, por donde según los últimos datos recapitulados por el Ministerio de Fomento circulan una media de 36.290 vehículos por jornada, de los que el 15,7 por ciento son camiones. En las proximidades de La Carlota, el aforo disminuye hasta los 27.709 vehículos al día, con un 26% de tráfico pesado; en la entrada desde Villa del Río, el volumen es de 17.766 desplazamientos diarios, de los que uno de cada cuatro son de camiones. Aunque inicialmente estaba previsto que la restricción se levantara al mismo tiempo en todo el tramo entre Villa del Río y Córdoba, Fomento ha querido agilizar la circulación coincidiendo con el puente de la Virgen de Agosto, uno de los periodos del año en que más desplazamientos se producen en toda la red de carreteras.

En el año 2009, el Ministerio de Fomento, con el socialista José Blanco al frente, llegó a tener sobre la mesa un documento para la adecuación, reforma y conservación del corredor de Andalucía a su paso por suelo cordobés, con un coste que se estimó en 188,12 millones de euros. La clave era reordenar la A-4, ya que en la comarca del Alto Guadalquivir -entre Córdoba y Villa del Río- cuenta con numerosas entradas y salidas y varias limitaciones de velocidad. En dirección a Sevilla, y al margen de la Variante de Córdoba y la Cuesta de los Visos, el trazado presenta varias puntos de riesgo de accidentes, como las curvas a la altura del río Guadajoz o la famosa Cuesta del Espino, un tramo peligroso, muy limitado en cuanto a velocidad y que concentra numerosos siniestros de tráfico. La propuesta nunca llegó a materializarse.

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