Hace un cuarto de siglo la ciudad que Aleixandre declaró mágica tenía un astuto político como Braulio Medel ejerciendo de banquero, una estrella de la pantalla de alcaldesa, y un agudo filósofo como director del Parque Tecnológico. Hoy, el economista que presidió 25 años con acierto Unicaja atraviesa un tormentoso divorcio sentimental con la ciudad y Celia Villalobos ha vuelto a las tertulias de televisión; ya no reinan bajo el cielo y sobre las aguas de Málaga. Pero el ingeniero de Telecomunicación, creador del PTA que ahora llaman Málaga TechPark, sigue siendo un líder social prestigioso. El viernes Felipe Romera fue investido doctor honoris causa por la Universidad, en acto presidido por el rector malagueño, la rectora de Granada y el rector de Córdoba.

El mérito de Romera ha sido implantar en Andalucía durante 30 años el modelo de innovación de Silicon Valley, con presencia de una universidad que ha crecido en paralelo y a pesar de la ausencia de un capital riesgo que escaseó. En el momento de arrancar su parque en 1992, Málaga era tras Madrid y Barcelona la ciudad con mayor número de telecos de España. Se estudiaba informática desde el 83 y Telecomunicación desde el 88; muchos de los 22.000 trabajadores actuales del parque son egresados de la UMA. En 1990 Fujitsu cerró el laboratorio de I+D dirigido por Romera, en el que había 130 personas que al salir al mercado protagonizaron los inicios del parque y el desarrollo de los centros politécnicos de la Universidad.

Como reflejo de su liderazgo, Málaga TechPark es desde 1996 sede de la Asociación Internacional de Parques Científicos, que forman ochenta países; desde 1998 allí está la Asociación de Parques Tecnológicos de España y también fue sede de la Red de Espacios Tecnológicos de Andalucía. Una cita del profesor Díaz Nosty fue utilizada el viernes al final la laudatio del doctor Carlos Camacho: "Embajador de la ciudad que el poeta confundió con el Paraíso, ha recorrido el mundo atrayendo actividad para el mayor núcleo tecnológico de Andalucía".

El discurso de Romera en su investidura dejó perlas. Una sobre el mundo de la mecánica cuántica, de las partículas subatómicas que componen la materia. Un mundo de indeterminación y probabilidades con planteamientos sobre si el mundo real existe o es fruto de nuestra imaginación. O datos técnicos, que hubo de repetir el orador: "El invento del transistor en 1947 es el más relevante que ha producido el género humano. Como ejemplo de su uso, un smartphone puede tener más de 15.000 millones de transistores; sí, sí, 15.000 millones".

Antiguamente los países tenían empresas públicas a las que se llamaba compañías de bandera. Eran monopolios de petróleo, telefonía o aviación que han desaparecido. Se puede decir que el PTA es una compañía de bandera de Andalucía en plena vigencia. La obra de este ingeniero visionario. Un valor seguro.