Supongo que se han dado cuenta. Hemos estado en la fase de campaña como estilo de vida. Nuestros políticos ya desayunan, almuerzan, meriendan y cenan en modo campaña y ya es prácticamente imposible -antes también lo era- detectar el mensaje real de la propaganda. En el anuncio del día tuvimos ayer a los populares José Antonio Nieto y José María Bellido y, como si de un deja vu se tratara, nos volvieron a hablar de la idea de un gran equipamiento cultural en el solar el Palacio del Sur. El Palacio del Sur, ¿recuerdan? Hay cosas que en esta ciudad nuestra que no cambian. Una de ellas es que la parcela en la que se iba a construir un palacio de congresos de vanguardia ahora sirve de aparcamiento o está criando jaramagos después de haberse gastado diez millones de euros en maquetas. El PP prometió 18 millones de euros de la Junta de Andalucía para equipamientos. 18 millones y la campaña real aún no ha empezado. Habrá que ver cómo queda la nómina de Juanma Moreno con Córdoba cuando llegue el 1 de diciembre porque si se sigue este camino será inasumible. Pero estamos en campaña y todo vale. Promete, que algo queda.

Pero la vendida de moto del día fue, sin duda, la puesta en marcha del Metrotrén-Cercanías-Media Distancia entre Villarrubia y Alcolea. En realidad la entrada en funcionamiento del servicio es una realidad y no se puede catalogar de promesa, pero resulta llamativo que con las elecciones autonómicas ya convocadas la alcaldesa, Isabel Ambrosio, y la subdelegada del Gobierno, Rafaela Valenzuela, se presten a una inauguración encubierta del servicio ferroviario, con trayecto y reportaje fotográfico incluido. No sé qué pensará la junta electoral central, pero la realidad es que la normativa prohibe a todas las administraciones -Gobierno central, Junta, diputaciones y ayuntamientos- ninguna "manifestación pública, mediante presentaciones, inauguraciones o cualquier evento similar de proyectos, logros, obras, edificios, servicios o resultados de estas instituciones". Demasiado claro parece que está.

En esta época en la que cuesta tanto sacar un proyecto adelante, es lógico que el Ayuntamiento en pleno -el domingo lo hizo el PP- acudiera ayer en pleno a la llamada del tren para hacerse la foto. Ya saben, estamos en campaña electoral.