Cada día resulta más difícil entender la relación entre el grupo municipal de Vox y el cogobierno de PP y Cs en el Ayuntamiento de Córdoba. Sabemos que la formación de Abascal es el socio preferente de populares y naranjas, pero no acaba de quedar claro si hay una relación fluida o si el postureo es el que manda. El cogobierno se ha tenido que plegar a una bajada de impuestos que no quería ante la exigencia de Vox. Y en lugar de agradecer el gesto, la respuesta del paratido de ultraderecha ha sido el de amenazar con llevar a los tribunales a PP y Cs por su falta de transparencia. Alguien debe explicarlo.