Si un Gobierno de la derecha hubiera gestionado la pandemia como el de Sánchez, sobre todo en los primeros meses, ni el confinamiento hubiera impedido las manifestaciones y que les llamaran de asesinos para arriba. Recuérdese que en 2014 el sacrificio del perro de la enfermera infectada por ébola originó manifestaciones en 24 ciudades, que se exigió la dimisión de la ministra de Sanidad y del consejero de Sanidad madrileño tanto por la muerte del animal como por la gestión de lo que se llamó "la peor crisis sanitaria en décadas"; crisis que duró cuatro meses y produjo una víctima.

Si un Gobierno de la derecha hubiera gestionado la crisis energética y la subida de la luz como el de Sánchez, protestas y manifestaciones habrían colapsado el país. Recuérdese que Sánchez tuiteó en diciembre de 2013, gobernando Rajoy: "La factura de la luz se elevará en enero un 11%. Otro golpe del gobierno a las familias". Recuérdese que en diciembre de 2017 Sánchez tuiteó: "La política energética del Gobierno de Rajoy empobrece al país. El recibo de la luz se encarece un 4,6% en lo que va de diciembre". Mientras el actual ministro Garzón tuiteaba: "Esta navidad la luz tendrá un precio un 10% superior a la del año pasado. Miles de familias no podrán mantener sus casas a temperaturas adecuadas, lo que repercutirá gravemente en la salud de los que menos tienen. Ningún gobierno decente debería tolerarlo". Recuérdese que en el debate sobre el estado de la nación de 2015 Sánchez le dijo a Rajoy: "Los precios que dependen de usted no han hecho más que subir durante sus años de Gobierno… Ha aumentado en un 10% la factura del gas (…) y ha aumentado en un 13% la factura de la electricidad. Señor Rajoy, usted le sale muy caro a los españoles".

Si un Gobierno de la derecha hubiera gestionado el conflicto de los transportistas como Sánchez lo ha hecho -"estamos peor que en la pandemia" se quejan desde el sector de la alimentación- o hubiera dado el volantazo que Sánchez ha dado con respecto al Sáhara -contra lo que se decía en el programa electoral del PSOE en 2019 sobre el derecho de autodeterminación saharaui- todos sabemos que la ira popular debidamente programada habría estallado. Pero como quienes gobiernan son los que con más habilidad la programan no pasa nada. Y si pasa -caso de la actual huelga y la reciente manifestación del campo- es que es cosa de la extrema derecha.