Jornada de descensos en los principales índices mundiales tras la batería de publicaciones empresariales con perspectivas negativas.

El índice IFO de confianza empresarial en Alemania se elevó en enero en línea con lo esperado hasta los 90,2 puntos desde los 88,6 de diciembre, reflejando unas expectativas ligeramente menos pesimistas, lo cual no repercutió en las bolsas.

Ayer EasyJet publicó una moderación de sus pérdidas y las acciones subieron más de un 10%. También generó optimismo Alstom, que tuvo un aumento de 8% en las ventas de los nueve primeros meses del ejercicio gracias al negocio europeo. Por su parte ASML batió las expectativas en la mayoría de métricas, y espera que 2023 sea un buen año. Sin embargo, la exigente valoración provocó que las acciones se mantuviesen. Boeing sigue registrando pérdidas, pero logró el primer flujo de cajapositivo desde 2018s. Por último, Texas Instruments, uno de los mayores fabricantes de chips, sufrió su primer descenso de ventas desde 2020.

En Europa, el Eurostoxx 50 perdió un 0,12%, deteniendo su tendencia alcista desde el inicio de año. Por su parte, el indicador europeo Stoxx 600 retrocedió un 0,29% afectado por los sectores de energía, industria y tecnología, frente al sector de utilities, que fue el único en permanecer en positivo.

En España, el Íbex 35 cayó un 0,11% y siguió sin superar los 9.000 puntos. Las mayores revalorizaciones se situaron en Rovi (3,38%), Aena (2,84%) y Amadeus (2,42%). En contraste, las mayores caídas se registraron en BBVA (-2,16%), Telefónica (-1,69%) y Repsol (-1,67%).

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