El estreno de Jazz en la pecera, de Teatro del Gallinero, clausuró la pasada madrugada la Feria de Artes Escénicas de Palma del Río, que ha celebrado su trigésimo quinta edición. La última jornada de esta cita incluyó siete propuestas que giraron entorno a a la danza, los viajes y el mundo onírico.

A la sombrita, Teatro de "pocas" luces abrió el programa con El tesoro de Barracuda, una adaptación a teatro de sombras de la novela Premio Barco de Vapor de Llanos Campos. Le siguió Nana, una canción de cuna diferente, la propuesta de Proyecto Nana que ha sido Premio Feten 2018 al mejor espectáculo de danza-teatro; y Los primeros de Europa, de los cordobeses Estigma Teatro.

A la caída de la tarde, Club Caníbal presentó Algún día todo esto será tuyo, en la que un afamado empresario pasea por sus recuerdos de infancia y sus andanzas en Cuba; mientras que ya de noche Danza Mobile acercó Helliot (Solo de danza contemporánea para públicos diversos), una pieza interdisciplinar de danza, teatro y performance obra de Antonio Quiles. En ella, el autor pretende discutir sobre lo único y especial que cada persona posee como individuo. El proyecto supone un viaje escénico desde lo individual a lo universal, de lo íntimo a lo social.

Mientras tanto, Aimar & Cía presentaba Etxea / Casa / Home, montaje de Isabel Jiménez Lama y Diego Aimar sobre un viaje fantástico de un personaje que necesita encontrar su sitio mediante los lenguajes del humor, la manipulación de objetos y el mástil chino. Por último, pasada la medianoche, Jazz en la pecera introdujo a los espectadores en la emisión de un especial programa de radio en el que una banda en directo recorrió la historia de este estilo musical.