Fiel a una larga tradición de audacia editorial, DC Comics sorprendió a propios y extraños en mayo de 2006 con la publicación de la maxiserie semanal 52, todo un experimento que duró exactamente un año, o, lo que es lo mismo, 52 semanas. Situada cronológicamente entre los sucesos de Crisis Infinita y la línea argumental One Year Later, la serie relata ese año perdido en la continuidad del Universo DC, un lapso caracterizado por el retiro temporal de los tres principales personajes de la compañía: Superman, Batman y Wonder Woman. En ausencia de la tríada icónica por excelencia, otros héroes y villanos como Booster Gold, The Question, Renee Montoya, Will Magnus, Black Adam, Lex Luthor, Animal Man, Starfire o Adam Strange saltan a escena y toman protagonismo en una maraña de argumentos que se van conectando hasta conformar una única y absorbente trama, con el tapiz de fondo de la desaparición de los cerebros más destacados del mundo.

La parte literaria del asunto es obra de un excelente cuarteto de guionistas formado por Geoff Johns, Grant Morrison, Greg Rucka y Mark Waid, que es tanto como nombrar a cuatro de los arquitectos de la moderna DC, y su dinámica de trabajo en 52 resultó también novedosa en la industria de la historieta, en su momento. En palabras de Dan Didio: "Los cuatro escritores, en vez de trabajar en guiones individuales como estaba previsto, decidieron que trabajarían juntos en cada número, cada uno con una asignación determinada de páginas por número para contar su parte de la historia". Para asegurar una coherencia visual, y puesto que el vertiginoso ritmo de edición hizo inviable el recurrir a un solo artista de principio a fin, cada número de la serie contó con storytelling previo de Keith Giffen, cuyos bocetos sirvieron de guía a una variada nómina de artistas entre los que figuran Eddy Barrows, Chris Batista, Joe Bennet o Shawn Moll, y no pocos entintadores. Entre los criterios unificadores de estilo se cuentan también las espectaculares portadas de J. G. Jones y el vistoso e influyente logotipo de la serie.

Por encima de otras consideraciones, 52 es un homenaje al rico patrimonio y la historia reciente de DC, un viaje a rincones menos habituales, generalmente eclipsados por los lugares comunes y los personajes más exitosos. Es por eso que en sus anotaciones sobre la primera semana de 52, el que fuera presidente de DC Paul Levitz escribe: "más que cualquier otro título de DC anterior, 52 es una colaboración. Una colaboración entre un equipo estelar de los actuales guionistas, artistas y editores de DC. Una colaboración entre tres generaciones de creadores, que añadieron personajes al Universo DC para contar las historias que querían contar y, finalmente, para que otros puedan retomarlos y transformarlos para tiempos posteriores".

52. Volumen uno es el primero de los cuatro tomos recopilatorios anunciados por ECC, y compila los números 1 a 13 de la exitosa serie, junto con numerosos bocetos antes inéditos y comentarios de algunos de los implicados en su creación. He aquí la oportunidad perfecta para disfrutar de uno de los proyectos más ambiciosos del género de superhéroes durante la pasada década.

VV.AA. ECC. 304 páginas. 25 euros.