Cultura

Mike Newell asegura que su nuevo filme era "una necesidad vital"

  • El realizador destaca en Madrid la dificultad que le ha supuesto adaptar a la gran pantalla la novela de Gabriel García Márquez 'El amor en los tiempos del cólera'

El cineasta inglés Mike Newell recaló ayer en Madrid para presentar su nueva película, El amor en los tiempos del cólera, un proyecto que se había convertido en "un reto casi imposible" y "una necesidad vital" y que cuenta como protagonistas con Javier Bardem y Giovanna Mezzogiorno.

"Adaptar esta obra, para mí una de las grandes historias de amor de la literatura mundial, fue fantásticamente difícil, y hasta que comprendí que no podía abarcar todo no conseguimos la mejor versión", explicó Newell, quien ha dirigido cintas como Cuatro bodas y un funeral (1994) y Harry Potter y el cáliz de fuego (2005).

El filme, que se estrenará el próximo 18 de enero y que está rodado en inglés, relata la historia de amor entre Florentino Ariza y Fermina Daza, pero, sobre todo, habla de la fidelidad "no convencional" y de la esperanza que mantiene su protagonista, Bardem en la pantalla, que espera 50 años a su único y verdadero amor.

"Conjugar la dualidad entre el amor ideal y las más de 600 mujeres con las que se acuesta el personaje fue un pequeño problema al principio para Bardem, hasta que comprendió que Fermina era como una cometa que guiaba las otras relaciones, que no le hacían feliz pero eran totalmente necesarias", explicó el director de Donnie Brasco (1997).

Por su parte, la actriz Giovanna Mezzogiorno afirmó sobre el actor español, que se encuentra de promoción en Estados Unidos por su candidatura a los Globos de Oro, que trabajar con él ha sido "una lección". "Es consciente de su enorme potencial y lo lleva al personaje, que se convierte para él en una obsesión. Además es tremendamente generoso y me ha ayudado mucho, algo que no es muy normal en una estrella", añadió la italiana, premiada en el 2005 en el Festival de Cine de Venecia.

Para la actriz, que debe interpretar a una Fermina de 15 y 70 años, lo más difícil fue conseguir el movimiento óptimo que su personaje necesitaba para cada edad, para lo que estuvo entrenándose con un experto cerca de un mes antes del rodaje, realizado en Cartagena (Colombia).

Tras varios años intentando comprar los derechos de la obra, Newell consiguió que García Márquez accediese a su proyecto y mantuvo con él varias entrevistas, telefónicas siempre, ya que el escritor colombiano se estaba tratando de sus problemas de salud entre México y Los Ángeles. Cuando le enseñó el primer borrador del guión, realizado junto a Ronald Harwood, García Márquez le instó a no ser tan fiel a la novela y a intentar retratar más en profundidad su pulso y su técnica.

"García Márquez escribe como si hiciese bordados, capa a capa", aseveró Newell.

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