Cultura

Martínez de Pisón revisa la reciente historia española en 'Dientes de leche'

  • El escritor señala que Franco "instauró en los primeros años un régimen de exterminio"

Tras la Guerra Civil, Franco instauró un régimen de exterminio en el que el miedo apabulló a la población, según el escritor Ignacio Martínez de Pisón, que en su última novela, Dientes de leche, recorre 50 años de la historia de España a través los secretos "pequeños y grandes" de una familia.

El autor del ensayo sobre el republicano José Robles Enterrar a los muertos y del guión de la película Las 13 rosas explicó que ahora le "tocaba" hablar del bando nacional. Seguir ahondando en la Guerra Civil es la respuesta a la curiosidad que siente por la historia reciente de España.

"Es un pasado que está vivo y las cicatrices aún no han cerrado. Hacía falta que los nacidos en los 60 demos una visión que aspire a la objetividad, que no a la neutralidad, porque para mí el lado de los buenos será siempre el de la República", confiesa Martínez de Pisón (Zaragoza, 1960).

En Dientes de leche (Seix Barral) cuenta la historia de una familia, como en sus otras novelas, pero "alargando" el marco temporal, que comienza en 1937, cuando el fascista italiano Raffaele Cameroni llega a España junto a otros 80.000 compatriotas alistados para luchar contra la República.

"No vinieron aquí por ideología. Eran todos unos muertos de hambre que querían cobrar un sueldo y salir de la pobreza. Además, muchos de ellos habían sido extras obligados de las películas que encargaba Mussolini; por eso, cuando les derrotaron los republicanos en Guadalajara, sus generales se preguntaban cómo iban a ganar una guerra con un ejército de figurantes", rememora el escritor.

Cameroni se enamora de una joven enfermera del hospital de Zaragoza, donde llevaban la mayoría de los heridos italianos, y a partir de ahí su historia y la de sus hijos corre paralela a la de la guerra, la posguerra y la democracia, hasta 1987, punteado todo ello por la ocultación de pequeños y grandes "pecados capitales".

"En realidad es una novela sobre secretos. Todos los personajes están definidos por ellos y por la forma en la que el autoritarismo -representado ferozmente por Cameroni- invade su intimidad y expone sus tesoros escondidos, que no salen a la luz porque siempre es más importante lo que ocultamos que lo que declaramos", asegura.

En esa ocultación está la clave del miedo que sienten algunos de sus personajes, que viven abrumados por la responsabilidad de expiar una culpa que no es suya.

"Franco instauró en los primeros años y hasta que Hitler perdió la guerra un régimen de exterminio en el que el miedo era lo que predominaba. Bastaba con tener un hermano anarquista muerto para ser sospechoso", indica.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios