Rusia admitió ayer haber reducido sus entregas de petróleo a la República Checa asegurando que la disminución está ligada a motivos puramente "técnicos", informaron ayer fuentes checas.
"La parte rusa afirmó tener problemas técnicos y aseguró que no hay nada político", declaró un portavoz del ministro checo de Industria y Comercio tras un encuentro en la Embajada de Rusia en Praga.
La reducción de las entregas rusas por el oleoducto de Drushba comenzó en junio y se agravó a principios de julio, en el momento de la firma del acuerdo de defensa antimisiles negociado entre Praga y Washington con vistas al despliegue de un potente radar detector en suelo checo. Moscú se opone a este proyecto. Alarmado por la coincidencia, el Ministerio checo de Exteriores pidió oficialmente explicaciones a Rusia a finales de la semana pasada.
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