Mundo

La OEA suspende a Honduras en apoyo a Zelaya, que regresará a su país

  • La decisión de la OEA aísla todavía más al régimen instalado en Tegucigalpa y liderado por Roberto Micheletti.

La Organización de Estados Americanos (OEA)  suspendió el sábado a la noche en Washington la membresía de Honduras,  expresando así su apoyo al presidente depuesto, Manuel Zelaya, quien anunció su  decisión de regresar a su país este domingo por la tarde. 

La suspensión de Honduras fue aprobada por unanimidad -excepto Honduras que  no participó en la votación- durante una Asamblea General extraordinaria  reunida en la sede de la OEA en Washington y luego de que las autoridades de  Honduras no cumplieran un plazo de 72 horas impuesto por la organización la  semana pasada. 

La decisión de la OEA se desprende directamente de la aplicación del  artículo 21 de la Carta de la organización, que estipula que la suspensión de  un país miembro puede realizarse debido a una "interrupción inconstitucional  del orden democrático de un Estado miembro y que los pasos diplomáticos se  revelaron infructuosos". 

La resolución insta además a los "Estados miembros de la OEA y las  organizaciones internacionales a revisar sus relaciones con Honduras". 

Es la primera vez desde que lo hizo con Cuba en 1962 que la OEA opta por  suspender a uno de sus miembros. 

La decisión de la OEA aísla todavía más al régimen instalado en Tegucigalpa  y liderado por Roberto Micheletti, y significa un claro apoyo de la  organización internacional a Zelaya, que ha reiterado que planea regresar a su  país este domingo por la tarde. 

Honduras vive "un régimen del terror que está vivo. Fueron seis días de  represión que ha vivido el pueblo. El pueblo ha sufrido", afirmó Zelaya ante el  pleno de la OEA y luego de la votación. 

El mandatario hondureño derrocado por un golpe de Estado hace exactamente  una semana reiteró que este domingo regresará a su país. 

"Vuelvo porque se necesita que vuelva la paz", enfatizó. 

Al llegar a la sede de la OEA en Washington, Zelaya había dicho que era  "optimista" sobre la situación generada tras el golpe. 

Antes había anunciado que regresaría este domingo a su país acompañado de  "varios presidentes", a los que no identificó. 

"Estoy organizando mi retorno a Honduras (...) nos vamos a presentar al  aeropuerto internacional de Honduras en Tegucigalpa con varios presidentes,  varios miembros de comunidades internacionales (...) Este domingo estaremos en  Tegucigalpa", había dicho Zelaya a la cadena de televisión multiestatal  Telesur. 

El ex embajador de Honduras ante la OEA, Carlos Sosa, anunció luego que el  avión de Zelaya saldrá "hacia las 10H00 (14H00 GMT) de Washington hacia  Honduras y llegará hacia las 15H00 (21H00 GMT)" a bordo de un avión privado  cuya lista de pasajeros aún tiene que confirmarse. 

La presidenta argentina, Cristina Kirchner, indicó a la prensa de su país  que la acompaña en Washington que no viajaría a Honduras con Zelaya,  contrariamente a lo que había anunciado. 

En Tegucigalpa miles de seguidores de Zelaya que se preparaban para  recibirlo pasaron la noche en albergues habilitados por sindicatos y  universidades y tienen previsto realizar una marcha hacia el aeropuerto que  comenzará a las 10H00 (16H00 GMT) del domingo. 

Sosa no quiso precisar si el avión de Zelaya aterrizará en Tegucigalpa o en  otro lugar. Calificó el viaje de "misión pacífica" y exhortó a los hondureños a  rechazar cualquier acto de violencia. 

El secretario general del organismo, el chileno José Miguel Insulza, que el  viernes estuvo en Tegucigalpa, recomendó la suspensión de Honduras de la OEA  pues "no hay alternativa a continuar con la postura y considerar la aplicación  del artículo 21 de la carta democrática interamericana". 

"No existe ninguna disposición de las autoridades de facto de Tegucigalpa  de restablecer a Zelaya", dijo Insulza, antes de opinar que la vuelta de Zelaya  a su país es "riesgosa". 

"Pienso que hay riesgos, por supuesto. Si me pregunta si será un regreso  seguro, por supuesto que no", dijo Insulza a la prensa. 

Las autoridades de facto de Honduras amenazaron con detener a Zelaya ni  bien pise el territorio. 

De hecho, los aliados políticos regionales de Zelaya apoyaron sin reserva  al jefe de Estado derrocado, pero no respaldaron claramente su intención de  regresar a Honduras, con excepción de Venezuela. 

El canciller venezolano, Nicolás Maduro, instó a la OEA a "acompañar al  presidente Zelaya (...) y buscar por todas las vías (...) que ese regreso sea  incondicional y de manera inmediata". 

Cristina Kirchner consideró ante la Asamblea General que era "necesario  implementar una estrategia común que permita reconstruir el gobierno" de  Zelaya.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios