El canciller austriaco, Sebastian Kurz, afirmó ayer en Jerusalén que la seguridad de Israel es una "razón de Estado" para su país, en el marco de una visita oficial en la que se reunió con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.

"Eso significa: la seguridad de Israel para nosotros no es negociable", dijo Kurz en declaraciones reproducidas en Twitter por la filial alemana del Comité Judío Estadounidense (AJC, por sus siglas en inglés). El embajador austriaco en Alemania, Martin Weiss, confirmó las manifestaciones y destacó que es la primera vez que un jefe de Estado de Austria se pronuncia de esa manera al respecto.

La canciller alemana, Angela Merkel, había declarado ante el Parlamento israelí en 2008 que la responsabilidad de su país en la persecución de los judíos era "parte de la razón de Estado" de Alemania, y que la seguridad de Israel "nunca" será negociada.

Kurz dijo ayer que su país combatirá el antisemitismo en Europa y que apoyará las necesidades de seguridad de Israel. "Puedo asegurarle que Austria combatirá con determinación toda forma de antisemitismo en Europa, ya sea el que sigue existiendo o un nuevo antisemitismo importado", afirmó durante una rueda de prensa en Jerusalén. "Intentaremos aumentar la conciencia en Europa de la situación y necesidades de seguridad especiales de Israel", añadió.

La visita de tres días de Kurz es vista como un intento de superar los roces provocados por el pasado nazi de un partido de extrema derecha que forma parte del Gobierno de Viena.