El Defender P400e se convierte en la versión más potente de este SUV de Land Rover, con sus 404 CV. También es la más rápida, una aceleración de 0 a 100 km/h de 5,6 s y la que menor consumo combinado homologa, con 3,3 l/100 km (WLTP).

Este sistema híbrido combina un motor de gasolina de 2 litros, un cuatro cilindros que, sobrealimentado, entrega 300 CV; y un eléctrico de 143 CV. Con su batería de iones de litio de 19,2 kWh este último motor puede mover por si solo al Defender durante 43 km, lo que le permite contar con la etiqueta cero de la DGT.

Dispone de un cable de carga modo 3 y, en opción, modo 2. El primero se utiliza para las cargas con corriente alterna a través del un conector Mennekes; el segundo, con conector shucko, permite recurrir a enchufes domésticos. Además, el Defender P400e puede recibir energía de cargadores de corriente continua, admitiendo potencias de hasta 50 kW.

Además de cargas con corriente alterna, esta versión híbrida enchufable admite algo que no es muy frecuente en este tipo de sistemas, cargas con corriente continua.

El sistema de propulsión híbrido enchufable 2.0 Si4 PHEV de 404 CV está sólo disponible con la carrocería larga, la 110, con cinco o seis asientos -también 5+2-.

Como las versiones con otros motores, el Land Rover Defender presume de una cualidades off-road por encima del resto de SUV al disponer de tracción total permanente, reductora, bloqueo de diferencial central y trasero activo en opción. La altura respecto al suelo es de 29 cm, con ángulos de ataque, ventral y salida de 38, 28 y 40 grados. La capacidad de vadeo es de 90 cm.

El P400e tiene tres modos de funcionamiento, un híbrido con el que funciona por defecto; uno en el que se reserva la carga eléctrica y otro en el que sólo se usa la batería para moverse.

El P400e puede remolcar hasta 3.000 kg. También soportar sobre su techo 168 kg en movimiento o 300 en estático.

Sus precios van desde los 74.230 euros del nivel Standard a los 116.789 del X.