El encarecimiento de los precios de los suministros energéticos, especialmente de la luz y del gas natural, se ha cobrado la primera víctima en la actividad empresarial de las industrias onubenses, unas instalaciones intensivas toda vez que en algunas de ellas llega a suponer hasta el 40% de sus costes. Fertiberia detendrá su actividad productiva en la sede de Palos durante al menos un mes, al no poder hacer frente, en este caso, a los precios del gas natural que le sirve como suministro energético. El director de Metalúrgica de Atlantic Copper, Carlos Ortiz, reconoció a Huelva Información que la situación de costes actuales amenaza a la competitividad empresarial y que espera que sea una situación coyuntural para que no se produzcan más paradas.

Por el momento, Fertiberia aprovechará el mes de detención de la producción para realizar la parada técnica, es decir ese mecanismo por el que todas las industrias implementan mejoras en sus procesos productivos por lo que se ven obligadas a detener su actividad de una manera completa o parcial. Así, según explicaron desde Fertiberia, no se llevarán a cabo reajustes en su plantilla en espera de que los precios energéticos recuperen su normalidad.Cabe recordar que Fertiberia tiene en marcha importantes inversiones en las instalaciones de Palos para la producción de amoniaco verde.

Tampoco es el único caso. Según ha podido conocer Huelva Información, Cepsa ha reducido sus márgenes, aunque todavía los mantiene en un rango calificado como “razonable”.A pesar de ello, desde las dos plantas que la energética tiene operativas en el Polo Químico onubense, se asiste con preocupación a este incremento de costes que repercute de una manera directa en la rentabilidad de su producción.

Carlos Ortiz reconoció a este periódico que “la situación actual de escalda de precios de la energía, por el alto precio internacional del gas natural y la especulación de los derechos de emisión de CO2 supone una amenaza para la competitividad de los productos de Atlantic Copper, ya que mas de un tercio de los costes operativos totales son de energías, principalmente electricidad, seguido por el gas natural”.

La intención de la empresa, según su director de Metalurgia, “es mantener la producción y la actividad en espera que a corto plazo los precios vuelvan a valores razonables y esta subida de costes se vea aminorada por la asignación de la administración de las adecuadas compensaciones en los derechos de emisión a los sectores de alto consumo eléctrico”, denominadas electrointensivas.

Estos derechos de emisión han entrado en un mercado puramente especulativo, un mercado paralelo en el que se pagan cantidades cada vez más exorbitadas que no logran compensar el más que importante esfuerzo llevado a cabo en los últimos años por las industrias onubenses de cara a reducir de una manera constante y significativa las emisiones de CO2.

Refinería de Cepsa situada en la localidad de Palos.

Sirva como dato de la Memoria de la Asociación de Industrias Químicas, Básicas y Energéticas (Aiqbe) que, teniendo en cuenta los números del año previo a la pandemia (2019) el descenso de las emisiones de la industria se redujeron un 2,9%, tanto las procedentes del comsumo de combustibles (1,3% menos), como las procedentes de los propios procesos industriales (-6,5%), destacando la bajada en los sectores de minerales no metálicos y de la metalurgia.

Ortiz espera que “esta situación coyuntural de altos precios agudiza la situación desfavorable que tiene la industria española frente a otros países como Francia o Alemania, dentro de un mercado global y amenaza el futuro de la actividad industrial para irse a otros países con precios mas favorables, ya sea por una menor carga fiscal o por no soportar los gravámenes de la descarbonización. Los metales son productos internacionales y en el mercado concurren fabricantes de todos los países y continentes, estén o no en vías de descarbonizados”.

A corto plazo, continúa Ortiz, “esperamos que haya medidas de las administraciones para evitar la especulación en el mercado del CO2 que encarece los precios energéticos, optando por ejemplo, con el incremento del volumen de derechos de emisión; conjuntamente con la eliminación permanente del impuesto sobre el valor de la producción de la energía (IVPEE), actualmente suspendido. Otra acción necesaria es el desarrollo efectivo del estatuto de la industria de consumo electrointesivos. Que permitan sobrevivir a estas industrias y evite la deslocalización de la fabricación de productos básicos y necesarios”.

A medio plazo, Atlantic Copper “apuesta por consolidar su estrategia de suministrarse de energías renovables con contratos bilaterales a largo plazo, que además de contribuir a la sostenibilidad ambiental de su producción, ofrece estabilidad en los precios. Y seguiremos potenciando el ahorro energético en base a la mejora de la eficiencia energética de sus equipos y procesos químicos, para ello, es clave que se incentive la recuperación de calor de los procesos y su conversión en energía eléctrica, actualmente completamente desincentivado por la administración”.

En lo que se refiere a más largo plazo, “esperamos que la mejora de interconexión del mercado español permita equilibrar los precios eléctricos con el resto de Europa. El fomento de las tecnologías para obtener un almacenamiento de la producción intermitentes de las energías renovables”. Por ultimo, Ortiz reclamó. una coordinación entre el plan nacional de descarbonización con el plan de desarrollo industrial, inexistente en la actualidad, es fundamental para el futuro y éxito del plan de descarbonización.