Charlene de Mónaco acaparó todas las miradas en el front row de la Semana de la Moda de París por su arriesgada apuesta en la vestimenta. La esposa de Alberto II se decantó por un look entre rockero y gótico, con un vestido de encaje de manga larga con cuello cisne y un pequeño bolso del mismo color. Su cadera, marcada por el corte del outfit, evidenciaba su figura atlética. Aunque la gran sorpresa del estilismo fue la moderna chaqueta motera de cuero que usó para protegerse de las bajas temperaturas parisinas, una elección poco usual en ella. A los pies, unos salones negros que remataban el total black.La ex atleta ha dado un toque moderno a su fondo de armario en el mejor marco posible, la fiesta de la moda francesa, con la que la temporada de pasarelas toca a su fin. Concretamente, la princesa Charlene asistió al desfile de prêt à porter de la firma Akris apoyando así de forma activa el sector de la moda y apuntando las últimas tendencias.