España

Siguen las diferencias en el Gobierno por la ley del 'solo sí es sí'

  • La ministra de Ciencia apuesta por una revisión de la norma en su visita a Sevilla

  • Podemos defiende la "solidez" de la legislación y asegura tener el apoyo del PSOE

La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant , en su intervención durante su visita a Sevilla.

La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant , en su intervención durante su visita a Sevilla. / Raúl Caro / Efe

La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, ha señalado este miércoles que, si el poder jurídico interpreta la ley de libertad sexual, conocida como la ley del solo sí es sí, "de manera distinta a lo que ve el poder legislativo y no se está cumpliendo con la voluntad del legislador todavía tenemos una oportunidad de ajustar lo que haga falta".

En declaraciones a Canal Sur Radio, la ministra, que visita hoy en Sevilla la sede que albergará la Agencia Espacial Española, ha añadido que los "jueces son los que tienen que hacer cumplir con las leyes que se generan en la sede del poder del pueblo, que son los que legislan".

En este sentido, ha recordado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dijo ayer que el Ejecutivo "estudiará la interpretación que hacen los tribunales para ver si hay que ajustar la ley para que se cumpla la voluntad del legislador".

Ha admitido que es una ley que puede generar ciertas dudas en su aplicación y, por eso, se estaba pendiente de la interpretación de la Fiscalía y del Tribunal Supremo, si bien ha dejado claro que la ley nació con una "voluntad clara de proteger a las mujeres frente a los delitos de acoso, abuso y agresión".

Podemos defiende la ley

Por su parte, Podemos ha defendido que la ley es "sólida" y un "avance incuestionable", cuyo problema no es la norma sino una "incorrecta" aplicación por parte de algunos jueces, y no duda "ahora mismo" del apoyo a la normativa por parte del ala socialista, dado que tanto Morant, como la minsitra de Defensa, Margarita Robles, ya "recularon" al apuntar a la posibilidad de revisión al inicio de la polémica.

Así lo ha indicado la coportavoz estatal de la formación, Isa Serra, previa a que el presidente del Gobierno Pedro Sánchez se mostrara ayer abierto a modificarla puntualmente, si bien esos retoques se harían después de que se vuelva a pronunciar el Tribunal Supremo y establezca ya jurisprudencia. Mientras, desde Podemos han insistido durante las últimas fechas que nadie ha planteado ningún cambio concreto a la legislación

Para Serra, la controversia sobre la ley radica en un "alarmismo" fomentado por la "extrema derecha" a través de una "ofensiva" que va a continuar, dado que se llegó a decir al inicio que iba a "hacer falta un contrato para mantener una relación", que se iba a "meter en la cárcel por decirle guapa a una mujer" y ahora acusan de que va a dejar "violadores en la calle".

De esta forma, Serra ha concluido que la diversas ministras socialistas salieron a cuestionar la ley apelando a la revisión para responder a esa "campaña", pero después la mayoría de ellas "han reculado" y tomaron el "camino de valorar, apoyar y sostener la Ley 'solo sí es sí'. Es más, ha comentado que ahora mismo no duda de que esa continúe siendo la postura del PSOE.

La dirigente de la formación morada ha subrayado que no tienen datos exactos de revisión de penas a condenados por agresión sexual y violación en distintas audiencias provinciales, pero por lo que conocen considera que son "minoría" respecto a los que optan por mantenerlas.

"Cambiar la cultura de la violación"

Y es que la dirigente del partido morado ha reivindicado que el objetivo de esta norma es "cambiar la cultura de la violación por la del consentimiento", un factor que ahora se "pone en el centro" junto a la garantía de los derechos para el conjunto de mujeres que sufren agresión sexual.

Ha aseverado que se protege a todas las víctimas con independencia de que presenten denuncia, algo que solo hace el 8% mientras que el 92% quedaba fuera de esas garantías porque desconfiaban de la justicia les diera reparación.

En consecuencia, ha destacado en materia jurídica que la ley simplemente "transforma" el esquema del Código Penal, para atender los cambios culturales impulsados por el movimiento feminista para que sea agresión todo lo que no sea consentimiento. Así, ha reiterado que no hay cambios ni bajada de penas máximas con un diseño "correcto" de la ley que permite mantener las condenas, como marca la jurisprudencia del Tribunal Supremo y la instrucción de la Fiscalía General del Estado.

A la espera del Supremo

Respecto a la posición del Tribunal Supremo, ha mostrado prudencia sobre su dictamen sobre el caso Arandina porque ahora no conocen la argumentación de la sentencia y creen que, en todo caso, no es una respuesta a la controversia abierta sobre las revisiones de penas, puesto que respuesta a una apelación del fallo anterior del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.

Tras recalcar que esa sentencia del tribunal autonómico implicaba una rebaja de penas ante una "agresión brutal" que ahora se elevan, sí conocen que se difundió un comunicado por parte del Supremo que apuntaba a que bajaba un año, dejando en nueve, la petición de 10 años por parte de la Fiscalía en virtud de esta ley, algo de que a falta de conocer los pormenores del razonamiento jurídico "desconfían" y les lleva pensar también en una "inadecuada" interpretación.

Por tanto, no entienden que se opte por fijar nueve años ante una agresión sexual de estas características con la horquilla de penas fijada por la Ley. No obstante, ha pronosticado que el Supremo abordará próximamente la polémica de la revisión en profundidad, y confía en que "respetará su jurisprudencia" y "hará caso" a esa instrucción de la Fiscalía que va en la línea de lo marcado en su día por el alto tribunal.

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