El Gobierno español enviará a Cataluña un "número suficiente" de efectivos policiales en caso de que el Govern persista en su política de permisividad y de dejación de funciones ante las acciones de los Comités de Defensa de la República (CDR) que ponen en riesgo la seguridad de los catalanes.

Es la advertencia que ha reafirmado este miércoles el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a la Generalitat catalana, en línea con la carta remitida el lunes por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, al conseller de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet.

En el Pleno del Congreso de los Diputados sobre Cataluña, Sánchez ha dejado claro al Govern catalán que "no aceptará que se produzca" ninguna "dejación de funciones" en relación con las instrucciones que deben recibir los Mossos d'Esquadra para garantizar la seguridad en Cataluña, como la que tuvo lugar el fin de semana ante el cierre de la AP-7 durante 15 horas por los CDR y los levantamientos de las barreras de peaje en otras vías catalanas.

Manipulación inaceptable

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha calificado de "manipulación inaceptable" el reclamar la vía kosovar o eslovena para la independencia de Cataluña y una "reivindicación" de quien no tiene ningún argumento para sus ideas.

En su comparecencia en el Congreso para explicar la postura del Gobierno sobre la situación en Cataluña, Sánchez ha respondido de esta manera a la propuesta del presidente de la Generalitat, Quim Torra, de una vía eslovena y ha reprochado la "injustificable inacción" y dejación de funciones del Govern ante los incidentes del pasado fin de semana.

Como miembro de Gabinete del Alto Representante de Naciones Unidas en Bosnia para la reconstrucción, que fue en 1999, Sánchez ha asegurado que conoce el caso kosovar de primera mano "no toca de oídas" y ha afirmado que todo lo que se sitúe fuera de la Constitución y del Estatuto tendrá "una respuesta firme y serena, proporcional y contundente del Estado social y democrático de derecho".