El líder del PP, Mariano Rajoy, fue la ausencia más notable en la votación de los Presupuestos en el Pleno del Congreso que ayer aprobó la Cámara Baja. A la hora de las votaciones, en el hemiciclo faltaban, además de Rajoy, siete miembros de su formación y el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran Lleida.

El escaño de Rajoy permaneció vacío mientras los 342 parlamentarios presentes se pronunciaban sobre las iniciativas legislativas sometidas a consideración de la Cámara en el último Pleno del año.

Fuentes de la dirección de los populares justificaron la ausencia de Rajoy porque, según indicaron, lo que se decidía en el Congreso no era la aprobación definitiva de las cuentas públicas, sino levantar el veto establecido por el Senado, y para eso bastaba el respaldo de 176 diputados que el PSOE tenía ya asegurados.

El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, reaccionó ante esta ausencia y arremetió contra el líder de la oposición. Así, lamentó que Rajoy hiciera "dejadez" de sus obligaciones por "deleitarse en una sobremesa con puro de por medio". "Fumándose un puro, eso es lo que parece que debía estar haciendo Rajoy" mientras se votaba, señaló Blanco, quien subrayó que "sólo una buena justificación serviría para perdonar su ausencia de la votación de la ley más importante del año".

La ausencia de su rival político demuestra, en palabras de Blanco, que Rajoy "no es capaz, ni siquiera, de atender las obligaciones por las que le pagan" y, por eso dice entender "mejor la desesperación interna que corre como la pólvora en el PP".

"La votación de hoy era, además de importante, muy simbólica. Y difícil lo tiene un líder de la oposición que pretende optar a la Presidencia del Gobierno si, en una cita como esta, hace dejadez de sus obligaciones", remachó.