España

El Gobierno alaba la dimisión de Saiz y no descarta que siga la depuración del CNI

  • De la Vega elogia la decisión "personal y responsable" de abandonar el cargo y deja la puerta abierta a nuevos relevos en aras de la normalización del servicio secreto · Sanz Roldán despacha con Chacón

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, afirmó ayer que la dimisión de Alberto Saiz al frente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) ha sido una decisión "responsable" y personal que el Gobierno ha aceptado, y subrayó que su sustituto, el general Félix Sanz Roldán, es un profesional con una trayectoria "impecable".

El Consejo de Ministros aprobó ayer el nombramiento de Sanz Roldán, el primer militar que dirigirá a los espías españoles tras ocho años de mando civil pero cuya condición castrense "no afecta para nada a las funciones del CNI", según De la Vega. "Ese debate ya ha sido superado", añadió la vicepresidenta.

De la Vega explicó que el Gobierno siempre elige a las personas "más capacitadas para un cargo" y subrayó que Sanz Roldán ha demostrado a lo largo de su dilatada carrera su "eficacia y lealtad al servicio de España y los españoles". "Esto es claramente indiscutible y es lo más relevante", insistió. Por eso añadió que "no hay lugar para el debate" sobre su condición de civil o militar, algo ya "superado", y se mostró convencida de que desempeñará sus funciones de forma "responsable y estupenda".

Por otra parte, la vicepresidenta no descartó que haya más relevos y destituciones dentro del CNI aunque se limitó a decir que será el nuevo director quien deberá tomar "las decisiones que considere más oportunas para que el CNI siga funcionando con normalidad". No obstante, aseguró que serán decisiones "responsables" y "al servicio de los ciudadanos".

De la Vega reiteró que la salida de Alberto Saiz se debe a que a que "no es bueno que un día sí y otro no" se cuestione su trabajo, máxime cuando tiene que ver con la seguridad nacional. "Mantener esa situación, no era bueno para nadie, así lo ha entendido el señor Saiz y así lo ha entendido el Gobierno". En este sentido, señaló que la decisión de Saiz fue "responsable y personal", que el Gobierno la "ha entendido, respetado y aceptado" y que el único objetivo del Ejecutivo siempre es tomar las decisiones que más benefician a los españoles.

La vicepresidenta aprovechó para agradecerle su "gran labor" en los últimos cinco años y le deseó mucha suerte en las nuevas tareas que tenga. Asimismo, minimizó la importancia de que la ministra de Defensa, Carme Chacón, estuviera fuera de España ya que tuvo un seguimiento de todo el proceso.

La ministra despachó ayer con el nuevo director del CNI apenas una hora después de que el Gobierno le nombrara al frente de los servicios secretos españoles. La reunión, que se celebró en el Ministerio de Defensa, duró casi una hora y transcurrió en un ambiente de cordialidad, según fuentes del departamento de Chacón.

Durante la reunión, el nuevo jefe del CNI le comentó a la ministra que espera estar a la altura de las circunstancias y no defraudar las esperanzas depositadas por el Gobierno.

El general Sanz acudió vestido de civil a este encuentro privado, al que sólo pudieron acceder fotógrafos y cámaras de televisión para conseguir imágenes de los primeros instantes.

El ex presidente del Gobierno Felipe González afirmó ayer que la designación del general Sanz Roldán es una "fantástica elección para el servicio".

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