Entre leones

Bibiana Aído dirá que no

  • Ridao asegura que ZP ha acertado nombrando a Chaves y prescindiendo de Álvarez. Los Cassinello han podido con Saiz. Polémica en el Congreso por la vestimenta. Pocos entienden lo de Rajoy con Bárcenas

Elogios del portavoz de ERC a Manuel Chaves

El portavoz de ERC en el Congreso de los Diputados, Joan Ridao, se deshizo en elogios hacia el ex presidente de la Junta y actual vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, en una entrevista a este periódico. Ridao, hijo de un almeriense de Cuevas del Almanzora, dijo haber encontrado en él a "una persona dialogante y muy receptiva". "No le conocía personalmente y tengo que agradecerle su trato cordial y deferente", agregó. No tiene Ridao el mismo concepto de la ex ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, a quien atribuye "el récord mundial de incompetencia y peticiones de dimisión". "Cualquier persona que sustituyera a Magdalena Álvarez estaba llamada a ser mejor que ella", sentenció. A su juicio, "con el nombramiento de Chaves y la sustitución de Magdalena Álvarez por José Blanco, Zapatero ha dado dos pasos positivos". Por cierto, la bicefalia entre Chaves y Salgado está dificultando el acuerdo sobre la reforma de la financiación autonómica.

Con chanclas y a lo loco

Buena se ha liado en el Congreso a raíz de que el secretario general de la Cámara baja, Manuel Alba, viera entrar a un individuo, invitado por un funcionario, con chanclas, camiseta deportiva y una especie de coulotte. De inmediato, Alba dio orden verbal en las porterías de tarde de que no se dejara a entrar a nadie con una vestimenta similar. Al día siguiente, sin embargo, no transmitió nada. Cuando el asunto salió en los medios de comunicación, el presidente del Congreso, José Bono, se desmarcó de la medida a través de una nota de prensa dictada desde Uruguay. Más allá de que Bono y Alba tendrán que hacer una puesta en común para coordinarse un poquito mejor, la polémica ha abierto un debate en el Congreso. En opinión de no pocos, el decoro en eso del vestir deja mucho que desea, pero no sólo entre los visitantes. En una reciente despedida de un asesor parlamentario del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, una señorita con un vestido vaporoso otorgó más transparencia de la debida al acto.

Dimisión cantada

La salida del director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Alberto Saiz, estaba cantada desde que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, declarara que le apoyaría mientras estuviera en el cargo. Finalmente ha podido con él más la situación interna creada por su plan de depurar a unos 60 agentes que sus jornadas de pesca en mares exóticos y los buzos limpia-piscinas del CNI que se agenció para la suya. En resumen, Saiz no ha podido con los Cassinello, asegura algún que otro miembro de la Comisión de Secretos Oficiales. Además, la ministra de Defensa, Carme Chacón, se lleva finalmente el gato al agua ante la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, que fue la máxima valedora de que Saiz continuara en el CNI una vez cumplido el periodo máximo de cinco años. Lo sustituye una persona de confianza absoluta de Zapatero, el jefe del Estado Mayor de la Defensa entre 2004 y 2008, el general Félix Sanz Roldán, que en la actualidad estaba como asesor de Presidencia para asuntos de Defensa y centrado en preparar la presidencia española de la UE. Este militar conquense de 64 años tiene fama de caer de pie donde aterriza. Debe ser porque su madre lo alumbró en un taxi y literalmente nació de pie. Ahora le tocará pacificar una auténtica casa de grillos.

Rajoy y Bárcenas

El regreso de Luis Bárcenas a la sede de Génova absolutamente enrocado en su decisión de no dimitir está poniendo al presidente del PP, Mariano Rajoy, en un serio aprieto. Entre los suyos no son pocos los que empiezan a cuchichear al no entender que su patrón le haya exigido ya la dimisión. Mientras que el caso Gürtel sigue devorando la credibilidad de Rajoy, a quien se atribuye una cierta incapacidad genética para tomar decisiones, el PP, a través de su portavoz en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, se felicitó por la dimisión del director del CNI, Alberto Saiz, y continúa cargando contra el ex presidente andaluz y actual vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, por la subvención concedida por la Junta de Andalucía a una empresa en la que trabaja su hija como abogada.

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