Economía

Las quitas de deuda llevan a Abengoa a ganar 5.561 millones hasta marzo

Central de Solúcar en Sanlúcar la Mayor (Sevilla), propiedad de Abengoa.

Central de Solúcar en Sanlúcar la Mayor (Sevilla), propiedad de Abengoa. / archivo

La multinacional andaluza Abengoa obtuvo un beneficio neto de 5.561 millones de euros en el primer trimestre de 2017, frente a las pérdidas de 340 millones del mismo periodo del año anterior, debido a la inyección de más de 5.800 millones que recibió en sus cuentas como consecuencia de la reestructuración financiera.

Ese beneficio no recurrente por 5.814 millones fue consecuencia de la cancelación de pasivos financieros (quitas de deuda) por 8.461 millones, compensada por el alta de nueva deuda refinanciada por 1.943 millones, un efecto impositivo por 566 millones y comisiones y otros gastos por 138 millones.

En un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el grupo de ingeniería y energías renovables informó además de unas ventas entre enero y marzo de 336 millones, un 21% inferiores a las del mismo periodo de 2016, y de un resultado bruto de explotación (ebitda) negativo de 24 millones, frente al ebitda positivo de 28 millones de hace un año. La reducción de la facturación y el resultado operativo negativo se deben, principalmente, a la situación del grupo durante los tres primeros meses del ejercicio producida por la "fuerte" limitación de recursos financieros a la que lleva sujeto durante más de año y medio (recordemos que recibió la inyección el mismo 31 de marzo). Esta situación afectó "significativamente", según la firma sevillana, a la evolución del negocio operativo tras la ralentización en el desarrollo de proyectos EPC fundamentalmente en las zonas geográficas de Norteamérica, Sudamérica y Sudáfrica. En el Ebitda influyó también el incremento en los gastos por servicios de profesionales independientes por los asesores participantes en el proceso de reestructuración. Todas estas cifras excluyen el impacto de la actividad de bioenergía y de las concesiones de las líneas de transmisión de Brasil, que se presentan como resultados procedentes de operaciones que están en proceso de venta.

La compañía precisa que ese beneficio de carácter no recurrente se ha calculado teniendo en cuenta la fecha efectiva del contrato de reestructuración, el 31 de marzo de 2017.

El reconocimiento de este resultado positivo proveniente de la quita de deuda y las ampliaciones de capital previstas en el contrato de reestructuración compensan en gran medida las pérdidas reconocidas al cierre del ejercicio 2016 (por 7.629 millones) y ha permitido restablecer el equilibrio patrimonial en la compañía, según el comunicado. Así, tras el acuerdo de reestructuración, la firma cuenta con un patrimonio neto consolidado a 31 de marzo de este año de 6.292 millones de euros (5.814 millones de euros en la cuenta de resultados y 478 millones de euros en el capital y prima de emisión).

La reestructuración financiera implica también una reducción significativa en el endeudamiento financiero bruto consolidado de la compañía, que ha pasado de 12.258 millones a cierre del ejercicio 2016 a 5.734 millones a 31 de marzo de 2017. De estos 5.734 millones de endeudamiento financiero bruto, 2.257 millones corresponden a deuda de sociedades clasificadas como susceptibles de venta.

Por áreas de negocio, las ventas en la actividad de ingeniería y construcción alcanzaron 295 millones de euros y un Ebitda negativo de 49 millones de euros, frente a 391 millones de euros y 7 millones de euros, respectivamente, en los tres primeros meses de 2016. Mientras, la cartera de ingeniería y construcción a 31 de marzo asciende a aproximadamente 2.400 millones de euros, tras la contratación de nuevos proyectos por valor aproximado de 200 millones de euros en Chile, Argentina, Reino Unido y Bélgica, entre otros.

Las ventas en infraestructuras de tipo concesional alcanzaron 41 millones de euros y un Ebitda de 25 millones de euros en el primer trimestre, comparado con 34 millones de euros y 21 millones de euros en los tres primeros meses de 2016. Este aumento se atribuye, principalmente, a los ingresos de la planta termosolar Khi en Sudáfrica que entró en operación a finales del ejercicio 2016, así como a mayores rendimientos en determinados activos concesionales.

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