El vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, aseguró que con la revisión del cuadro macroeconómico aprobado hoy, el Gobierno "quiere ofrecer la visión más realista" de la actual coyuntura económica.

Así se pronunció Solbes en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que revisó el cuadro macroeconómico y rebajó siete décimas la previsión de crecimiento de la economía española para este año, hasta el 1,6 por ciento, y 1,3 puntos la de 2009, hasta el 1 por ciento.

El vicepresidente insistió en descartar que la economía española vaya a entrar en recesión, y reiteró que el crecimiento del segundo trimestre habrá sido "del 0,1 o del 0,2 por ciento".

Añadió que calcula que los peores registros del PIB se producirán en la segunda parte de este año y en el primer trimestre de 2009, aunque como mucho con "crecimiento cero", pero sin llegar a decrecer.

Solbes también insistió en que el Gobierno no cuenta ya con margen para tomar nuevas medidas discrecionales, como la rebaja fiscal de 400 euros.

Las causas de la rebaja del crecimiento para este año, explicó, son sobre todo el alza del crudo -el barril costaba 103 dólares en abril cuando se elaboró el anterior cuadro macroeconómico, frente a los más de 130 actuales-, y el aumento del Euribor -índice hipotecario de referencia-, que se situaba en el 4,59 por ciento frente a 5,36 por ciento actual.

"Solo esos dos factores justifican la reducción de siete décimas en 2008" y de 1,3 puntos en 2009, aseveró el vicepresidente, quien concretó que dos terceras partes de la rebaja de este año se deben al encarecimiento del crudo.

A esta situación, dijo, hay que sumarle las tensiones inflacionistas "que han dificultado la respuesta de la política monetaria".

Recordó que el nuevo cuadro macroeconómico será la base sobre la que se elaborarán los Presupuestos Generales del Estado para 2009, cuyos ejes serán, dijo, la austeridad, la solidaridad y la mejora de la productividad.

Insistió en que la prioridad absoluta del gasto será la protección de las personas que pierdan su empleo y por eso al techo de gasto previsto se sumarán 1.500 millones de euros adicionales destinados a garantizar el pago de las prestaciones, dado que para 2008 hay remanentes suficientes.

"Nos preocupan las personas que pueden perder su empleo, aunque eso suponga incurrir en un pequeño déficit", dijo Solbes, quien en cualquier caso insistió en que se aplicará la austeridad y el rigor en el resto de las partidas de gasto, cumpliendo con los compromisos de la Ley de Dependencia, el Fondo de Reserva de la Seguridad Social y las pensiones.

Este rigor, unido a las medidas ya tomadas para impulsar la economía "y a las que tomaremos", son "la receta para superar la crisis", subrayó.

El titular de Economía explicó que desde el pasado 25 de abril, cuando se presentó el anterior cuadro macroeconómico, la situación económica internacional se ha deteriorado "de forma notable", lo que ha hecho que el ajuste de la economía española "esté siendo más rápida e intensa de lo esperado".

"Nos enfrentamos a la situación económica más compleja de las últimas décadas", aseveró, aunque reiteró que la economía española está mejor preparada que la mayor parte de las europeas.

Tras ajustar los ingresos y los gastos previstos para el próximo año, el vicepresidente segundo calcula que en 2009 el Estado tendrá un déficit de 3.865 millones de euros, el 0,34 por ciento del PIB, frente a la previsión anterior, de un superávit del 0,2 por ciento.

En cualquier caso, recordó que este déficit se ajusta a lo previsto en la Ley de Estabilidad Presupuestaria, que permite incurrir en un saldo negativo de hasta el 0,4 por ciento cuando el crecimiento es inferior al 2 por ciento.

Insistió en que la recuperación económica comenzará en el segundo semestre de 2009, para, en 2010, volver al potencial de crecimiento de la economía española, que en anteriores ocasiones Solbes ha cifrado en el entorno del tres por ciento.