Los efectos colaterales de la crisis de la vivienda se dejan sentir cada vez con mayor virulencia entre las empresas que surten de todo tipo de productos a los constructores. Roca, el fabricante catalán de sanitarios y suelos de cerámica, ha presentado ante el Ministerio de Trabajo un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que prevé la extinción de 398 contratos en sus plantas de Gavà (Barcelona), Alcalá de Henares (Madrid) y Alcalá de Guadaíra (Sevilla), así como en sus oficinas en Barcelona, debido a la caída de las ventas provocada por la crisis inmobiliaria.

Francisco Santiago, presidente del comité de empresa de la fábrica de Sevilla por Comisiones Obreras, explicó ayer a este diario que en Alcalá serán 42 los trabajadores afectados. "Se trata de prejubilaciones para empleados a partir de 55 años y que cobrarán el 85% de su salario neto hasta los 63 años". Representan el 10% de la plantilla total de Alcalá de Guadaíra, compuesta por 430 trabajadores. Respecto al volumen total del ERE, Sevilla absorberá el 10,5% de esas 398 prejubilaciones previstas.

Roca posee otra fábrica en Dos Hermanas (Sevilla), denominada Cerámicas Bellavista, que no se verá afectada por estos planes de reducción de plantilla. En esta segunda instalación, Roca produce sanitarios bajo marca blanca.