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De vuelta con una necesaria renovación

El Lucena arranca hoy su tercera temporada en Segunda B, la más complicada tras un verano que ha puesto a la entidad al borde de la desaparición. Porque desde la agónica salvación en la última jornada de la pasada campaña, el club ha vivido sus días más duros, con reiterados mensajes de SOS, reuniones con el Ayuntamiento y gestiones para encontrar la viabilidad necesaria. Así, el Lucena inicia un nuevo curso sobre el césped con un déficit reconocido de medio millón de euros del curso pasado y una deuda con la plantilla estimada en más de 300.000 euros. Con ese difícil panorama comienza una temporada en la que el objetivo será estabilizarse en Segunda B.

Los reconocimientos médicos de la mañana darán paso a la primera sesión (20:00, Ciudad Deportiva). Antes, a las 12:30, se presentará a David Agudo, Nacho Garrido y Marín, tres de los nueve fichajes que hasta ahora ha hecho un renovado equipo celeste.

Porque el segundo proyecto de Francisco Ramírez Aceituno con Rafael Rojas al frente de la dirección deportiva trae una forzosa bocanada de aire fresco en un equipo que la pasada campaña ofreció demasiados puntos débiles. Así, sólo permanecen en la plantilla el portero Toni García, los defensas Babin y Pérez, los centrocampistas Sarmiento, Troiteiro y Quique y Cabello en la delantera, siete futbolistas que seguirán a las órdenes de Alberto Monteagudo.

La renovación del plantel ha traído nueve fichajes con dos nombres que destacan por encima de todos: Javi Moreno y Ariel Montenegro. Rojas ha vuelto a tirar de ex jugadores del Córdoba para comandar el proyecto celeste, pero esta vez con un punto aún más mediático. El delantero vuelve por una mezcla de amistad y deseo de volver a ser futbolista. Ya no es el hombre por el que el Milan pagó 2.000 millones de pesetas hace ocho años, y probablemente tampoco sea el estilete del Córdoba que logró el ascenso hace tres años, pero tras colgar las botas el pasado mes de diciembre después de unos meses en el Ibiza, el Búfalo quiere volver a la carga, y Lucena es el sitio escogido. Montenegro es otro veterano con galones, uno de los jugadores más técnicos que ha pasado por el Córdoba en la última década. Su pierna derecha es un guante, algo que ya vieron también en el Pontevedra, Numancia o Hércules. Hace un par de semanas dejó al Gimnasia y Esgrima de Jujuy para aceptar la llamada de Rojas. Suya será la manija en el centro del campo celeste.

Junto a los dos veteranos ex cordobesistas, el Lucena ha firmado a los defensas Marín (Linense) y al cordobés Domingo (Zamora); los centrocampistas Óscar Ventaja (Puertollano), David Agudo (Badajoz), Juanma Cruz (Gramanet) y Abraham (Villa de Santa Brígida); y al también cordobés Nacho Garrido (Portuense). En total, nueve fichajes que completan una plantilla que a día de hoy sólo cuenta con 16 profesionales. A ellos se unirán los canteranos Paco Molina, Cisco Jurado, Servián, Cabeza y Paco Pastor, que tratarán de hacerse un hueco en la lista de 22. O mucho convencen a Monteagudo a al menos un par de fichajes más deben llegar a Lucena antes de que la liga arranque a finales de agosto con la visita al Sangonera.

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