Rafael Escribano, que fuera fundador y presidente del Zoco, equipo de base que brilló desde finales de los 70 hasta primeros de los 80 y que fue uno de los primeros equipos cordobeses en militar en la Liga Nacional Juvenil, ha recibido un más que merecido, sentido y cariñoso homenaje de jugadores, directivos y técnicos que formaron parte de este histórico club cordobés.

Entre otros, estuvieron presentes en el acto Miguel Merino (directivo), Emilio Cano, Antonio García Llácer, Eduardo López, Paquito Utanda, Luis Martínez, Peque, Valentín, Antonio Sánchez Caler, Carmelo Salas o Antonio Carnero; además de otros como Toni Muñoz, Pepe Murcia o Cepas, que no pudieron asistir.

Rafael Escribano es una historia viva del fútbol cordobés, y no ha quedado en el olvido su enorme calidad humana más allá de los éxitos deportivos alcanzados con su Zoco. Prueba de ello es que se reunieron en torno a él cerca de un centenar de personas que, en su día, formaron parte de este legendario club.