Sin dudas y sin miedos. José González cogió ayer con energía el toro por los cuernos durante su comparecencia habitual de cada miércoles y estuvo muy firme en sus respuestas. Así, no se cortó al valorar el estado en el que se encuentran sus futbolistas: "El equipo es consciente, está trabajando bien, nos estamos comportando como bloque y eso me hace estar más tranquilo". Tanto que, a estas alturas, le duele enviar a la grada a cualquiera de los miembros de la plantilla: "Yo, por mí, me llevaría siempre a todos".

Ése es el caso, por ejemplo, de Javi Flores, "un futbolista en el que creo ciegamente, y que si tuviera una pretemporada con él, luego jugaría mucho conmigo".

Así que, si la confianza es plena en los mimbres, no tiene por qué salir una mala cesta: "No tengo motivos para no creer, porque los argumentos de la última semana están ahí y eso que hemos perdido con el Sporting, que está casi en Primera". Un reflexión complementada con la victoria cosechada hace dos domingos en El Arcángel: "El Numancia nos sacaba 32 puntos y eso quiere decir que habían hecho muchas cosas mejor que nosotros. Y les ganamos. Nos hemos enfrentado a equipos superiores en cuanto a comportamiento todo el año y hemos estado ahí. Y estoy seguro que, para la semana que viene, en San Sebastián respetan al Córdoba".

Porque, a juicio de José, "no somos ni peor ni mejor que nadie. Creo en el grupo y en que somos capaces de ganar los dos partidos que nos quedan hasta el final".

Pero sólo les vale uno de los dos en este momento. Todo lo hablado, todo lo escrito, todo lo especulado, será papel mojado si el Córdoba no es capaz de imponerse sobre el verde de El Arcángel al Racing de Ferrol. El técnico gaditano sabe muy bien lo que les espera el domingo: "No sé lo que les valdrá aquí, pero ellos tienen una forma de jugar muy clara, con un 4-1-4-1. Generalmente, los partidos contra ellos van a ser partidos feos, sin florituras".

Así que los aficionados cordobesistas deben prepararse para sufrir: "El contrario no suele hacer su mejor partido contra el Ferrol, porque trabajan muy bien en el medio, defienden bastante bien e intentan salir muy vertical. Contra eso estamos trabajando, pero sí hay que mentalizar a la gente de que no vamos a ganar en el minuto uno. Va a ser un partido de noventa y tantos minutos y vamos a tener que sufrir en el campo. Hay que ser inteligentes, porque es un equipo que defensivamente se pertrecha bien y es especial porque nos va a hacer un partido incómodo".

Ante tal coyuntura, sería determinante que el Córdoba fuera capaz de marcar lo más pronto posible: "Ojalá lo hiciésemos, porque sería una forma de encontrar más espacios, que a posteriori no vamos a encontrar. Lo hizo el Sevilla Atlético y le salió un partido relativamente cómodo. Pero el Racing es un equipo que ofrece muy pocas concesiones y que está teniendo buenos números. De los ocho últimos partidos ha ganado uno, pero ha empatado cinco. Es difícil de batir, pero sorprendernos no nos van a sorprender seguro. Vamos a afrontar el partido sabiendo qué hace el contrario, pero a ver si lo interpretamos bien". De eso dependerá en gran medida el futuro de la temporada.

No habrá muchos cambios, advierte José, toda vez que a pesar de que "hemos tenido algunas variaciones por jugar de local o de visitante", considera que "el bloque está trabajando bien. Y el que entre lo va a hacer bien seguro".

Javi Moreno anunció esta semana su marcha y hubo quien en la rueda de prensa se acordó del valenciano. De si debe o no ser titular en tan decisivo partido (el último en El Arcángel vestido de blanquiverde a priori). El entrenador del Córdoba no quiso entrar en debates que, a su juicio, no aportan nada en estos momentos, porque "tendría que cuestionar también si deberían jugar Arteaga, Diego, Antonio o Julio Iglesias. Ahora mismo Arthuro está haciendo goles y Asen también, y estoy más que contento". La felicidad de José será, de repetirse el próximo domingo a eso de las ocho de la tarde, la mejor noticia para todo el cordobesismo. Y de momento está muy tranquilo.